Otra historia de lo más curiosa alrededor de Thomas Delaney. El centrocampista danés del Sevilla, cedido en el Anderlecht el pasado verano, vive otro curso marcado por las lesiones: tras la última, convertido en Lobezno.
Con una sonrisa, Thomas Delaney ha contado en Dinamarca el proceso de una milagrosa recuperación en cuatro de semanas de una operación que le insertó en su hombro "nueve tornillos" y que, en un principio, le llevaría casi dos meses sin actividad profesional.
Aprovechando que las películas de superhéroes vuelven a estar de moda, Thomas Delaney, tal y como él mismo cuenta, se ha convertido en el héroe de Marvel que cuenta con Adamantium en su cuerpo, Lobezno. "Me operó un buen médico, ahora siento que hay nueve tornillos y una placa de metal en mi hombro cuando muevo la articulación. Puedo hacer todo de nuevo, sin problema", dice en unas palabras recogidas por Nieuwsblad.
Según sus palabras, la operación tenía un pronóstico de seis semanas de recuperación, pero una máquina de radiación ayudó a acelerarla. "Era una especie de máquina de ultrasonido, me sorprendió mucho. Vi que Brian Riemer dijo que iba a dormir con ese dispositivo, pero no estaba del todo bien. Me la tenía que poner sobre el hombro".
El danés, concentrado ahora con su selección, se centra en recuperar su mejor nivel, en demostrar que los que no creyeron en él se equivocaron, pero lo hará con "nueve tornillos" en su hombro... como si de un superhéroe de cómic se tratase.
Con tantos tornillos ya sabemos el negocio que va a montar cuando se retire, una ferretería.