180 días sin Marcao

Hablar de Marcao a estas alturas parece hasta repetitivo. Esa es la triste realidad de la relación entre el central brasileño y el Sevilla FC, un convenio que prometía muchísimo, que ilusionaba a pesar de sus constantes lesiones el pasado año pero que, con diciembre llegando, ha vuelto a dar la cara: 180 días sin el zaguero ex del Galatasaray.

Tenía dos semanas para reengancharse, dos semanas de parón, sin la exigencia de las convocatorias, sin las miradas de aficionados y prensa, para recuperar tono y opciones físicas, pero la realidad con Marcao es la que es.

Ante la Real Sociedad volvió a quedarse fuera de la convocatoria y era el propio Diego Alonso el que reconocía que la situación ya no es cuestión de lesiones, sino de "sensaciones", que es casi más preocupante.

En el Sevilla están buscando todas las fórmulas, todos los remedios, para que el central brasileño, al que no se le puede negar que tenía condiciones notables para ser titular en el equipo, pueda aportar algo, por mínimo que sea, pero la realidad es que su cuerpo no parece estar preparado para volver a la competición.

Con la llegada del mercado invernal, como sucedió en verano, su nombre volverá a ser señalado como una posible salida, como una posible cesión que permita que el futbolista recupere sensaciones, que se aleje de Sevilla y pueda al menos limpiar su mente ante tanto tiempo desaparecido.

El último día que jugó fue el 31 de mayo, en la final de la Europa League. Desde entonces, 180 días sin sus minutos... y una larga travesía a su alrededor que parece que nunca terminará.