El uno por uno del Sevilla en Los Cármenes: las buenas notas en el debut de Quique

El Sevilla FC de Quique Sánchez Flores parece otro Sevilla. Tres meses después, el equipo nervionense ha vuelto a ganar en LALIGA EA Sports, y lo ha hecho con uno de los mejores partidos de la temporada. El Granada no tuvo nada que hacer, y parece mentira que la funesta etapa de Diego Alonso acabara hace apenas tres días.

En ElDesmarque analizamos, una por una, las actuaciones de los jugadores blanquirrojos en el Nuevo Los Cármenes:

Dmitrovic (7): El Granada no le dio mucho trabajo, pero en la segunda mitad sacó con la punta del pie una clarísima a Puertas tras un error de Gudelj, evitando el 1-3 que podría haber cambiado la dinámica del partido. Portería a cero.

Juanlu (5): El Sevilla volcó casi todo su ataque por la derecha y no estuvo especialmente activo hacia arriba. Sí se mantuvo más o menos firme ante Antonio Puertas y Bryan Zaragoza, los hombres más dinámicos del Granada.

Gudelj (5): Estuvo a punto de meter al Granada en el partido con un pase incomprensible hacia nadie. No sufrió demasiado y tuvo algunas subidas interesantes, pero si Quique apuesta por la lógica, cuando tenga centrales suficientes debería devolverle a su puesto original, en el que jugó los últimos minutos.

Sergio Ramos (8): Imperial en defensa. Sobrado ante la inocencia del ataque del Granada. Redondeó su magnífico partido con el 0-3 que acabó con todas las dudas, al menos de momento.

Kike Salas (7): Venía creciendo en los últimos partidos, y en Los Cármenes firmó un verdadero partidazo. Serio en defensa, saliendo cuando hacía falta, y compenetrándose muy bien con Ramos. La izquierda del terceto de centrales parece su posición ideal.

Pedrosa (9): Por fin llegó su primer gol, con la colaboración de Carlos Neva, pero se merecía tener suerte. Después, estrelló otra pelota en el larguero con la diestra. Las dos acciones más llamativas del partidazo que hizo el catalán.

Soumaré (8): Ostras, vaya arrancada. Jugando como pivote en solitario, con un Óliver siempre solidario al lado, cuajó seguramente su mejor partido en el Sevilla. El rival exigió poco, pero el centro del campo fue suyo.

Óliver Torres (8): Jugó en una posición mucho más natural para él, y cuajó su mejor partido en mucho tiempo con la camiseta del Sevilla. Nunca se le ha podido negar su implicación y su trabajo, lo agradeció el equipo y, especialmente, Suso y Soumaré. Muy bien, muy protagonista, mejorando las jugadas y siempre ofreciéndose.

Ocampos (8): Empezó algo atropellado, especialmente jugando como pareja de delanteros junto a En-Nesyri, pero a la media hora se sacó un zapatazo espectacular para clavar el 0-2. Después tiró del equipo todo el tiempo para estirar el campo y poner en aprietos al Granada. Jugó casi todo el partido como segundo delantero, y funcionó.

Suso (9): El Sevilla no tiene ningún jugador como él y su concurso es fundamental, con Diego Alonso sólo fue titular una vez estando sano… Dos asistencias en su regreso, faro del equipo, aportando cosas diferentes, calidad y claridad sobre todo. La mejor noticia del día.

En-Nesyri (7): Parece que no tocó la pelota en el 0-1, pero lo que sí hizo es recuperar arriba la que generó el segundo. Hacía mucho tiempo que el marroquí no cuajaba un buen partido sin ver gol, y en Los Cármenes lo hizo. Se sintió bastante cómodo con Ocampos como escudero.

Suplentes:

Manu Bueno (5): El VAR le salvó de ser expulsado a penas unos minutos después de saltar al césped. Al final se quedó, mostró que tiene calidad y que necesita minutos para encontrarse cómodo.

Rafa Mir (5): Tiene una necesidad absoluta de marcar gol, lo que le nubla y le hace tomar decisiones equivocadas.

Januzaj (s.c.): Salió en el tramo final y prácticamente no la tocó.

Marcao (s.c.): Volvió a jugar medio año después. Se le notó, claro. Si no se lesiona antes del partido del Metropolitano, habrá sido todo un éxito.

Entrenador:

Quique Sánchez Flores (8): Sacó el once más lógico teniendo en cuenta lo que tenía disponible, arropó al equipo, sin arriesgar la pelota, haciéndole salir rápido al ataque, con un cambio de sistema nada más empezar que dejó inoperante al rival. Y sobre todo, y más importante, le quitó el hedor a muerto que desprendía en las últimas semanas. No tuvo tiempo de mucho, pero si le dijo a los muchachos que no hicieran nada de los que le pedía Diego Alonso, bien se reflejó en el campo. El Sevilla vuelve a ganar -lo hizo además muy bien- tres meses después en LALIGA EA Sports y ahora parece otra cosa.