Idumbo aprieta ante las exigencias de Quique Sánchez Flores

Idumbo Muzambo no ha dejado indiferente a nadie. Sus cualidades y su desparpajo ilusionaron a los técnicos desde el primer momento, y sus primeras actuaciones en el Sevilla Atlético gustaron, y mucho, a la afición blanquirroja. La historia, sin embargo, cuando se trata de un chico de 18 años recién llegado a la ciudad, a un club con tanta irregularidad y problemas, no suele ser sencilla y con el ex del Ajax, a pesar de toda su calidad, tampoco lo está siendo. 

Se ha convertido en un habitual de los entrenamientos y su nombre, dadas las múltiples bajas, suele ser uno de los que Quique Sánchez Flores pinta en sus convocatorias. Esa constante aparición invitaba a pensar en un debut temprano con el primer equipo, en el Bernabéu, cuando salió Januzaj, parecía ser el escenario perfecto. Pero Quique decidió esperar.

"Nos gusta por su velocidad, su verticalidad. Es un chico que tiene unas buenas condiciones, en el momento que entienda un poco mejor el juego, puede ayudarnos", decía hace días Quique Sánchez Flores al ser cuestionado por su figura. Ahora toca darle entrada.

Quique aprieta antes del estreno

Esa entrada al primer equipo, ese debut soñado, bien podría haber llegado en el Santiago Bernabéu. Aquella noche, en un contexto muy especial, en una situación poco habitual (lesiones, cansacio, bajas...), todas las miradas se centraron, en el tramo final, en Idumbo.

Quique Sánchez Flores, por entonces, decidió dar minutos a Januzaj, un futbolista que está totalmente condenado en la entidad, y dejó que el chico se quedase en el banquillo. Podría haber sido su debut, pero el técnico, otra vez, prefirió esperar.

"Sé que el entrenador tiene confianza en mí, pero está esperando el momento adecuado para utilizarme", dice Idumbo en 'La Derniere Heure'

La crítica se centró en dicha decisión, pero como todo en el fútbol, tenía una explicación. El extremo llegaba al Bernabéu tras jugar 70' con el Sevilla Atlético, 70', además, no demasiado buenos y es que hasta el propio Jesús Galván, técnico del filial, reconocía que no había sido el mejor día. "Tenemos que hablar con él. No es una situación sencilla estar entre el primer equipo y el filial, tenemos que entenderle, pero lo hablaremos para encontrar el mejor rendimiento", dijo el entrenador de los chicos.

Tocaba esperar, porque como sucede en cualquier equipo: si no estás bien con los tuyos, el premio tardará un poco más. 

Idumbo responde ante la exigencia

El chico lo ha entendido, comprende la dificultad de aparecer en el primer equipo y ha respondido de la única manera que puede: trabajo hasta en la jornada de descanso.

El extremo está muy ilusionado con su situación, siente la confianza del club y sueña, si el equipo consigue salvarse con tiempo, con jugar algunos minutos en LALIGA EA Sports este mismo año.

Quique le seguirá exigiendo. Comprensión y esfuerzo. De él dependerá dar el salto definitivo al primer equipo.