El entrenador del Sevilla FC, Xavier García Pimienta, ha comparecido en sala de prensa este jueves, en la previa del partido de la sexta jornada de LALIGA EA SPORTS, en la que su equipo visitará el estadio de Mendizorroza, con la importante baja de Marcao, para medirse este viernes al Deportivo Alavés, en el primer encuentro del fin de semana. Una cita que llega tras haber conseguido el primer triunfo de la temporada y con las expectativas de poder dar continuidad a la racha para coger impulso en la clasificación.
Una rueda de prensa que llegaba justo después de una última sesión de trabajo en la que el buen ambiente y las bromas han sido la nota predominante, con el propio entrenador sevillista como protagonista, llevándose incluso los pitos de sus jugadores por saltar unos minutos más tarde al césped de la ciudad deportiva.
Sobre ello, precisamente, se le preguntaba al técnico sevillista, en la comparación con temporadas anteriores: “Dejo atrás lo pasado en otros años. Me gusta la cercanía, el buen ambiente, porque es la mejor manera para trabajar. Intento ser justo. Dentro de unas jornadas, habrá gente que participe menos y habrá esas sensaciones contrariadas de gente que no participa. Siempre voy a buscar lo mejor para el equipo", decía.
Acerca de la anécdota del último entrenamiento y sus bromas con Loïc Badé, el preparador explicaba: "He salido tres o cuatro minutos tarde porque hemos hecho un vídeo en el gimnasio. Si hacemos bromas, la broma también me la tengo que llevar yo. Badé me debe tres cenas de tres compromisos de juego y me estaba esperando. El buen ambiente es obligatorio para que la cosa fluya y eso sí que depende de nosotros".
En lo que respecta al estado anímico del plantel después de la primera victoria, García Pimienta desvelaba que "el grupo está muy contento por la victoria del otro día, por cómo se produjo, con mucho sufrimiento, por cómo la afición nos ayudó en esos últimos minutos. Hemos ganado un partido, de forma merecida, pero tenemos que seguir ganando partidos". Posteriormente, se centraba en la cita ante el Alavés: "Es una semana más corta, con días suficientes para recuperar a la gente y el equipo está en plenas condiciones para un partido muy difícil ante el Alavés, un equipo fuerte en casa, que sabe a lo que juega tras tres temporadas con Luis (García Plaza). Hay que estar muy atentos en todos los conceptos, en juego directo y con centros laterales, pues te someten y, si te equivocas, no perdonan. Tenemos que estar muy concentrados", añadía.
Sobre si una hipotética victoria en Mendizorroza podría suponer un punto de inflexión, se mostraba escéptico: “Será la sexta jornada, quedarán muchísimos partidos, no va a ser definitivo. Tenemos que ser muy competitivos. Va a ser exigente, con todos los sentidos puestos en cada acción del partido, porque el Alavés sabe jugar a su futbol. No tiene ningún problema en que lo sometas, pero te salen cuatro veces en ataque y generan ocasiones claras. Es un buen momento para conseguir una victoria fuera de casa, para eso vamos a tener que trabajar muchísimo. Sería un buen punto en el sentido de conseguir una victoria fuer y dejar atrás esa pequeña racha de resultados”.
Además, se mostraba ambicioso, al referirse a la necesidad del equipo de "acostumbrarse a ganar". “Tenemos que ser ganadores, que queramos ganar cada partido. Vamos a conseguir la siguiente victoria y, después, a por otra más. Si queremos seguir creciendo, estar arriba, sin marcarnos un objetivo, todo pasa por competir. El Sevilla es un gran club en España y en Europa y tiene que acostumbrarse a ganar, y eso sí depende de nosotros”, dijo, añadiendo después, sobre el fin de su negativa racha a nivel particular, que "las rachas están para romperlas. Me quedo con una que hice en Las Palmas, que estuvimos 24 o 25 jornadas sin perder. No me supone nada. Cuando hacemos las cosas bien, ganaremos. Me gustaría diferenciar lo que pasó el año pasado. Estoy convencido de que será la primera de muchas victorias”.
De la amenaza de huelga de los futbolistas por el cada vez más exigente calendario de partidos oficiales, García Pimienta reconocía que “no he hablado con la plantilla. Un club como el Sevilla, acostumbrado a jugar muchos partidos... No es nuestro caso en esta temporada, pero los futbolistas están expuestos al día a día y es muy exigente, porque no te permite descansar. Apoyaría lo que decidan los jugadores”, aclaraba.
Por último, también dejaba su opinión respecto a las palabras del entrenador del Real Betis, Manuel Pellegrini, tras su partido frente al Getafe: “Comparto lo que dice Pellegrini en el sentido de que el fútbol es epectáculo. Los árbitros, si se equivocan, también son castigados. Tenemos que ayudarlos porque, cuando ganamos, no pasa nada y, cuando perdemos, nos quejamos. Todo estará más cerca de que pase lo que queremos, que el fútbol sea justo. El problema es cuando queramos engañar a los árbitros. Me parece bien que haya reuniones, te puedes mirar cara a cara y decirles lo que piensas”, finalizaba el entrenador sevillista.
Eso eso buen ambiente pues. A demostrarlo en el terreno