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Las condiciones de la continuidad de Saúl Ñíguez en el Sevilla

Saúl Ñíguez, en el Getafe-Sevilla (Foto: Cordon Press).
Saúl Ñíguez, en el Getafe-Sevilla (Foto: Cordon Press).
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Deletree conmigo: P E R I O D I S T A

La historia del Sevilla FC y Saúl Ñíguez empezó este verano, pero no está claro cuando acabará. Aunque estuvo a punto de llegar en propiedad, al final el centrocampista recaló en Nervión, como deseaba, pero en una operación de cesión desde el Atlético de Madrid. Xavier García Pimienta tenía al líder que deseaba para la medular, pero de momento el rendimiento no está siendo ni mucho menos el esperado.

El ilicitano lleva un gol y seis asistencias, pero todos esperaban más de él. De hecho, el sevillismo expresó su descontento cuando, en el descanso del partido ante el Athletic Club, fue sustituido por Sambi Lokonga, y sin el futbolista de cuerpo presente el graderío le dedicó una sonora pitada cuando su nombre salió en el videomarcador y sonó por la megafonía.

En estos momentos, el futuro de Saúl en el Sevilla no está claro, por lo que es pertinente aclarar cuál es su situación. Según ha publicado ABC de Sevilla, Saúl Ñíguez llegó con una cesión de dos años, con la que el club de Nervión paga al Atlético de Madrid una pequeña parte -dos ‘kilos’ netos- de los 14 millones brutos que estipula su contrato con los colchoneros.

Saúl Ñíguez, en el Sevilla-Mallorca (Foto: Kiko Hurtado).

El futuro de Saúl Ñíguez en el Sevilla

En 2017 firmó un contrato millonario con el Atlético hasta junio de 2026, justo la fecha hasta la que, en principio, estará cedido en el Sevilla. Sin embargo, tanto el club como el jugador tienen algo que decir con respecto a su continuidad, no así la entidad madrileña.

En resumen, la institución hispalense puede romper la cesión a final de temporada si así lo desea. En el club son conscientes de que el rendimiento no es el esperado, pero valoran su ascendencia en un vestuario muy joven, y además creen que puede dar mucho más de sí.

Por otro lado, el propio Saúl Ñíguez también puede decidir marcharse si llega una oferta económicamente inigualable del fútbol exótico. Eso sí, esta posibilidad se debe enmarcar en unas fechas, y ya en agosto no podría ser ejecutada.