El Sporting de Gijón encajó su cuarta derrota consecutiva ante el Málaga, corría el mes de marzo y el conjunto rojiblanco no levantaba cabeza. Fue entonces cuando en Mareo apareció la figura de Ricardo Serrés, un hombre dedicado a tratar con grupos de profesionales en el mundo del deporte que no pasan por sus mejores momentos anímicos.
No es que la plantilla de Abelardo Fernández sufriera una gran depresión ni que el grupo fuera menos grupo, simplemente se necesitaba un giro en el vestuario rojiblanco. Ricardo Serrés aterrizó en Gijón con la intención de realizar un par de jornadas con los guajes, pero terminó quedándose hasta el final de la temporada.
Desde el primer momento, el 'coach' introdujo pensamientos positivos en unos futbolistas que con el paso de los días volvieron a confiar en su fútbol y en su juego. La primera piedra en el camino fue el Atlético de Madrid de Simeone en El Molinón, y el resultado fue extraordinario. El Sporting fue capaz de remontar un golazo de Griezmann y quedarse los tres puntos.
Casi dos meses después de la última victoria el Sporting volvía a ganar un partido. Por delante quedaban ocho jornadas en las que se iba a luchar por la permanencia.
De los 9 encuentros que disputó el Sporting de Gijón con Ricardo Serrés programando actividades semanalmente, los hombres de Abelardo Fernández consiguieron 4 victorias, 3 empates y 2 derrotas. Un total de 15 puntos de los 27 que estuvieron en juego.
Sin duda la de 'Richi', mote que tenía el 'coach' dentro del vestuario fue una gran aportación de Nico Rodríguez. No es para menos que en la fiesta de la celebración de la permanencia se escuchara por parte de los futbolistas: "Richi, contigo empezó todo".