Las diez claves del Sporting en la primera vuelta
El Sporting ha hecho una primera vuelta para olvidar. Tan solo tres victorias, cuatro empates y el resto derrotas, que le colocan con 13 puntos marcando el descenso a segunda y con una pequeña brecha de cinco puntos con el Leganés, primer equipo en estar salvado ahora mismo. Una primera vuelta convulsa en la que ha pasado de todo y de la que extraemos diez claves por orden cronológico.
1. La planificación del equipo
Fue un verano movido en Mareo en cuanto a la parcela deportiva. Abelardo renovó hasta 2020, lo que era muestra de un proyecto de futuro, y de la confianza que se depositaba en el Pitu. Tras dos años con limitaciones para incorporar jugadores, la Dirección Deportiva se desató, e incorporó nada menos que a trece hombres, con una completa remodelación de la plantilla, apostando por un perfil de jugadores distinto al de años atrás.
2. Arranque fulgurante
El comienzo de la competición para el Sporting pocos lo habrían imaginado. Siete puntos conseguidos de nueve posibles, con victorias ante Athletic y Leganés en casa y empate ante el Alavés fuera. El equipo era al término de la jornada tres tercero, en puestos de Champions, algo anecdótico pero que reforzaba un arranque que ilusionaba a la afición rojiblanca.
3. Goleadas en contra
Pero el calendario se puso cuesta arriba. En la jornada cuatro ya venía una salida complicada como es el Calderón, seguida de Balaídos y de recibir al Barça en El Molinón. En esos partidos se vieron los primeros problemas y se encajaron sendas goleadas ante Atlético y Barcelona por 5-0, en unos partidos para olvidar sobre todo el del Calderón, pero unas derrotas que podían entrar en el guion.
4. Empate en Granada
La racha se siguió incrementando con las derrotas ante el Dépor y Valencia. Llegaba en la jornada nueve la visita al Granada, colista de la competición, y al que el Sporting no fue capaz de ganar. En el recuerdo queda la ocasión en el último minuto que ni Duje Cop ni Borja Viguera aciertan a embocar a portería vacía y que podía haber significado la victoria.
5. Derrota en Málaga
Se frenó la sangría con un engañoso empate en casa ante el Sevilla de Sampaoli, pero en Málaga vino otro mazazo. Y eso que el Sporting iba ganando 1-2 hasta el minuto 65, pero la expulsión de Lillo fue una losa que pesó sobre los rojiblancos que acabaron cediendo por 3-2 en un partido que estuvo controlado.
6. Cambio de sistema en el Bernabéu
La racha era cada vez peor y las sensaciones también iban cuesta abajo. En el horizonte tras la derrota en El Molinón ante la Real Sociedad aparecía la visita al Bernabéu en el peor momento posible. Abelardo probó entonces con el 5-4-1, sistema que llegaría para quedarse y dio entrada a Carmona que se ganó el puesto con goles. El resultado, derrota 2-1 y sensación de haber merecido más en un buen partido y con un penalti fallado por Cop en los instantes finales.
7. Victoria ante Osasuna
Primera gran final de la Liga y se sacó adelante. Osasuna llegaba en una depresión aun mayor que la del Sporting que se impuso con cierta solvencia al peor equipo que pasó por El Molinón. Tres puntos que frenaron la mala racha y que se sumaron al casillero para dar algo de alivio a la parroquia rojiblanca.
8. El peor día del Pitu
Tras la victoria ante los rojillos, derrota contra el Espanyol y llegaba el Villarreal, otro de los rivales más complicados, pero en El Molinón se confiaba en la victoria. En el minuto 19, los amarillos ya iban 0-2 en un partido en uno de los peores partidos de la temporada para el Sporting. Tras el encuentro, se vio a un Abelardo derrumbado en sala de prensa: "Es un palo muy duro. Tengo que recapacitar". Fue una semana complicada, con reuniones entre el entrenador y el presidente, que a la larga reconoció que tenían que haber llegado a un acuerdo para su salida esos días y no alargar la agonía.
9. Último partido de Abelardo al frente del Sporting
Una agonía que se prolongó dos partidos ligueros más y un partido copero. Tres derrotas. Merecidas. Y una imagen que no mejoraba en un Molinón que pedía la dimisión de su entrenador. Una salida que se selló el martes después del encuentro ante el Éibar y que puso fin a dos temporadas y media de Abelardo en el club rojiblanco, con un ascenso y una permanencia en la mochila.
10. Y Rubi llega para salvar al equipo
Nico Rodríguez tuvo clara su apuesta para el banquillo. El elegido fue Rubi, que el miércoles llegaba a Gijón y se hacía cargo del equipo ya desde el mismo jueves. Cuatro sesiones para preparar el partido ante el Betis donde sumó un punto y se dejó la portería a cero tres meses después. Un punto de partida de una carrera de fondo con una meta clara. La salvación.