Es el partido más importante del año. Puede ser un encuentro definitivo para el Sporting, que si no consigue la victoria dirá adiós a gran parte de las pocas opciones que le quedan de salvación. La afición rojiblanca es consciente de ello y estará detrás del equipo, respondiendo a la llamada pidiendo ayuda del vestuario. El Molinón va a reventar.
Lo dijo Rubi en la rueda de prensa previa al partido: "El estadio tiene que ser una olla a presión desde el minuto 1 al 95". Y así va a ser. En poco más de un día se agotaron todas las entradas disponibles, lo que asegura una gran afluencia y un mejor ambiente.
El mejor de la temporada para el partido más importante del año. Prácticamente un todo o nada en el que el apoyo de El Molinón puede ser el sustento del equipo en los momentos clave del partido. El Sporting quiere seguir siendo de Primera. El Molinón también, y luchará por ello.