Multa al aficionado del Sporting que increpó a Fernández

Después de que el Sporting de Gijón acabara certificando su descenso en la penúltima jornada ante el Éibar en Ipurúa, los aficionados rojiblancos aprovecharon el último partido en El Molinón para expresar su malestar por la pésima temporada. En el choque contra el Betis, se vivieron diversos episodios de tensión como el aficionado que increpó a Fernández en el palco, que ha sido multado por Comisión Antiviolencia con 3.500 euros y seis meses sin entrar en recintos deportivos.

 
Las protestas comenzaron en la previa del encuentro y después se trasladaron al campo, donde el Consejo recibió una sonora pitada de la afición del Sporting instantes antes de que empezar el partido entre los hombres de Rubi y el Betis.
Además, en torno al palco presidencial, se vivió un momento de tensión cuando un aficionado empezó a increpar al presidente Javier Fernández y al resto de la directiva sportinguista y tuvo que ser parado por los miembros de seguridad.
Por ello, la Comisión Antiviolencia ha decidido multar al aficionado con este escrito: "El aficionado que se acercó al palco presidencial e insultó al presidente del Sporting y agredió a miembros de seguridad durante el enfrentamiento ante el Betis, será sancionado con una multa de 3.500 euros y la prohibición de acceso a recintos deportivos durante seis meses".
Pero no fue el único seguidor del conjunto gijonés que ha sido multado, ya que el CSD ha ratificado dos sanciones más:
-Multa de 1.500 euros, y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de tres meses, a una aficionada local que, en el interior del estadio, entorpeció reiteradamente la labor de los funcionarios cuando procedían a una intervención e incitó a los aficionados allí presentes a que secundasen su actitud. Posteriormente, se negó a ser identificada además de no mostrar entrada o carné de socio en el partido Sporting-Betis.
-Multa de 1.000 euros, y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de tres meses, a un aficionado local que, junto a la entrada de vehículos del estadio, encendió dos bengalas con riesgo para los aficionados allí presentes en el partido Sporting-Betis, jugado el 20 de mayo.