Tras dar una explicación de como se planteará la plantilla de la próxima temporada, Miguel Torrecilla apeló al romanticismo sportinguista. "Nos gustaría que se pareciera a esa", dijo el director deportivo señalando a la televisión en la que proyectó su presentación. La imagen que se veía era un gráfico elaborado en 2016 por La Nueva España. En él, el mejor once rojiblanco de la historia. No es mal ejemplo en el que fijarse.
El once histórico del Sporting de Gijón formaba con Ablanedo; Redondo, Abelardo, Maceda, Cundi; Joaquín, Mesa, Luis Enrique; Ferrero, Quini y el Guaje Villa. En el banquillo, Vicente Miera. Esta alineación fue votada por cien aficionados en una encuesta realizada por el diario asturiano. Miguel Torrecilla, señalando al monitor en el que se mostraba esta infografía, comentaba su deseo de hacer algo parecido. "Nos gustaría que nuestra alineación tuviera los valores de ese once. Que tuvieran todos el sentimiento de pertenencia que tuvieron todos los que conforman el once histórico", aseguró Torrecilla.
Para lograr tan ambicioso objetivo, el salmantino señaló cual es el primer paso. "Nuestro modelo de trabajo es, primero, mirar que tenemos en casa", comentó el director deportivo.También añadió que "se debe mirar constantemente a la cantera para ver que jugadores están creciendo para formar parte del primer equipo". Como ejemplo práctico para comprender su explicación, puso el último partido del año. "Algunos ya se han consolidado en el primer equipo. Otros, como vimos contra el Cádiz, están ya tocando la puerta. Estamos deseando que alguno la rompa", sentenció Torrecilla dejando a las claras sus intenciones de trabajo.
Con el objetivo de inculcar esos valores en la primera plantilla del Sporting, el club también está intentando el regreso de jugadores que ya tuvieron un pasado en la entidad rojiblanca. El caso más evidente es el de Javi Fuego, un futbolista con experiencia contrastada dentro de un vestuario y que encarna a la perfección los valores de la Escuela de Fútbol de Mareo.