El delantero del Sporting de Gijón Uros Djurdjevic lleva marcados seis goles en las diez primeras jornadas, los mismos que anotó en toda la pasada temporada. Unos goles que han convertido al futbolista en pieza clave del buen comienzo del conjunto gijonés, ya que sus tantos han supuesto 12 de los 22 puntos que lleva el equipo.
El delantero serbio fue de los jugadores más criticados a lo largo de la pasada temporada en la que estuvo peleado con el gol y envuelto constantemente en incidentes con los rivales fruto de su ansiedad por marcar, todo lo contrario que en la presente, en la que está muy centrado y efectivo.
Djurdjevic había manifestado en los inicios de la temporada que creía que este iba a ser su año y el del Sporting y, hasta el momento, los hechos le están dando la razón, ya que es el segundo máximo goleador de LaLiga SmartBank y el equipo también está segundo a un punto del líder el RCD Espanyol. Marcó ante el Logroñés en la primera jornada y después fue decisivo ante el Girona, con un golazo, Almería, Alcorcón y en el último partido ante el Castellón.
Los números que está consiguiendo el Sporting son incluso superiores a los que ofrecía a estas alturas de las temporadas en las que acabó ascendiendo de la mano del fallecido Manolo Preciado o, posteriormente, de Abelardo.
Sin embargo, el entrenador David Gallego sigue insistiendo en frenar la euforia, que encuentra lógica en los aficionados, pero que asegura que no existe en la plantilla, a la que continuamente está recordando que quedan muchas cosas que mejorar.
El equipo gjjonés afronta ahora una parte del calendario bastante complicada, ya que en las próximas jornadas se enfrentará al Mirandés y Mallorca, fuera, y al Rayo Vallecano, en El Molinón, lo que volverá a ser un examen para ver hasta donde puede llegar este equipo plagado de canteranos como hacía años que no se veía.
Precisamente la presencia de jugadores formados en Mareo es una de los aspectos que más está valorando la afición, que siempre ve en los jugadores de la casa como el camino a seguir por el equipo.