El Sporting de Gijón mantiene las buenas sensaciones en este arranque de temporada. El cuadro rojiblanco se mantiene líder de LaLiga SmartBank y aún invicto, con cuatro triunfos y un empate en las primeras cinco jornadas. Un balance que le mantiene bien situado, pero que no quiere decir nada. Y es que la temporada pasada ya se pasó la mayor parte del tiempo en zona de ascenso directo para, en las últimas dos jornadas, caerse incluso de la promoción de ascenso a LaLiga Santander. Esta campaña, con la lección aprendida, los de David Gallego tratarán de mantener la racha y no fallar en las últimas fechas. Y para ello cuentan con un efectivo que estuvo muy cerca de salir, pero que poco a poco ha vuelto a ser importante. Hablamos, cómo no, de Nacho Méndez.
Y es que hace dos temporadas estuvo a punto de abandonar el Sporting de Gijón. El mediocentro, en un principio, no quería negociar con la entidad y tenía la intención de buscar una salida. Coincidió, de hecho, con su mejor momento deportivo como rojiblanco.
Eso sí, el club mantuvo una dura pugna para buscar ampliar su contrato. Llegó el verano de 2020 y la dicotomía era clara: vender al futbolista o dejarle un año en la grada para forzar su salida e ingresar algún tipo de compensación económica por su marcha. No obstante, ninguna de esas cosas ocurrió. Finalmente Nacho Méndez llegó a un acuerdo para su renovación con el Sporting, firmando hasta 2025.
Una decisión que, por una parte, mantenía su futuro ligado al de la entidad. Sin embargo, con la llegada de David Gallego, eso no aseguraría su futuro como titular. Y es que el catalán, conforme avanzaron las jornadas, fue teniendo cada vez más claro su doble pivote: José Gragera y Javi Fuego. Esto dejó, a priori, al de Luanco sin sitio. No obstante, con el paso de las fechas y la convocatoria de Manu García y Djuka con sus selecciones fue encontrando huecos. A veces como mediapunta, y otras como extremo por la banda derecha, fue sumando minutos importantes. No obstante, también acumuló semanas quedando fuera de las convocatorias y partidos sin disputar minutos.
Ahora, con la salida de Javi Fuego y de Manu García, había al menos dos plazas libres en el once titular de David Gallego. Y ha sido en el doble pivote donde el '10' del Sporting ha vuelto a encontrar su mejor versión. Junto a Gragera se reparte los espacios del centro del campo, tiene libertad para acompañar las jugadas ofensivas y no le falta un ápice de trabajo defensivo.
No en vano, fue titular las dos primeras jornadas, aunque el buen momento que atraviesa Pedro Díaz le ha relegado a la suplencia en las últimas tres fechas. Sin embargo, la temporada es muy larga y David Gallego querrá tener activados a la mayoría de futbolistas posibles para que el equipo no desfallezca, como en el tramo final de la temporada pasada.