Abelardo Fernández ha iniciado un período de reflexión para poder solucionar los problemas del Sporting de Gijón. Y es que, pese a que el arranque de temporada no ha sido malo, deben de mejorar en muchos apartados para poder confirmarse como un serio aspirante al ascenso. Ese es el gran sueño que tiene la afición, la plantilla y el Grupo Orlegi, si bien el entrenador asturiano ha querido dejar muy claro que todavía es pronto para pensar en ello. Y no quiere cargarse de presión ni de responsabilidades.
De momento, señaló a algunos jugadores, sin especificar nombres, por la pésima actuación contra el Tenerife, donde no pasaron del empate a uno. De hecho, es muy probable que en las próximas jornadas veamos múltiples cambios en la alineación. Sin embargo, ya ha encontrado al principal responsable de los problemas que arrastran en El Molinón Enrique Castro ‘Quini’, y se trata de la solvencia y la seguridad defensiva. No tiene duda de que ahí es donde deben de poner más énfasis.
Así lo acreditan las estadísticas, siendo capaces de dejar la portería a cero en tres de los últimos 23 choques, unos números preocupantes. ‘El Pitu’ es consciente de que los ataques ganan partidos, pero las defensas ganan campeonatos, y es por ello que insiste en mejorar en este apartado. Ofensivamente también deben de mejorar y crecer mucho, pues en pocos encuentros son capaces de marcar más de un gol, pero por ahora es en la retaguardia donde dedicará más horas de faena.
Una información que ha revelado el diario ‘La Nueva España’, y a raíz de la cual ya han comenzado a llegar las primeras teorías. Una de las medidas que puede tomar Abelardo sería un cambio de sistema, pasando a apostar por una línea de tres centrales con dos carrileros profundos. O también cambiar alguna pieza, y dejar de apostar por los futbolistas que no estén dando la talla. Otra cosa muy probable es que acuda al mercado invernal en busca de algún refuerzo, en caso de no solventar este problema antes del mes de enero.
En el próximo choque, en el que se verán las caras con el filial del Villarreal, tendrán dos obligaciones: la primera es sumar tres puntos, y la segunda no conceder ni un solo tanto.