El entrenador del Sporting Miguel Ángel Ramírez no descarta que Cristo González, al que hasta ahora utilizó como segundo delantero, sea la referencia ofensiva en el partido que medirá a los gijoneses al Burgos el próximo domingo.
Las bajas de Campuzano y Djurdjevic, operado hoy en Madrid de su lesión en la rodilla izquierda, dejan solo a Milovanovic en el puesto de delantero centro ya que, aunque Ramírez recupera a Jeraldino, éste apenas ha contado desde su incorporación en enero y además viene de una lesión.
"Cristo sabe jugar de delantero y lo puede hacer perfectamente", manifestó Ramírez que espera poder contar poder contar ya la próxima semana con Campuzano, lo que le daría más alternativas en la parcela atacante.
El técnico está pendiente de la evolución de las molestias que arrastran jugadores como Pedro Díaz, Aitor García y Jony que hoy se entrenaron al margen del grupo y que mañana realizarán una prueba antes de que Ramírez facilite la convocatoria para jugar en Burgos.
Para este encuentro, son bajas seguras Zarfino y Djurdjevic, intervenido de la lesión que sufre en su rodilla izquierda y que le mantendrá de baja entre seis y ocho semanas por lo que la temporada podría haber finalizado para él.
"Buscamos ser sólidos en defensa, en ataque y en las transiciones", indicó el técnico rojiblanco, que en tono irónico señaló que "cuando hay defensa de cuatro la piden de cinco y que cuando es de cinco la piden de cuatro.
"Tras el partido ante el Mirandés me senté con los jugadores para revisar el encuentro, nos hemos apretado unos a otros, hay que ser exigentes para rendir mejor", manifestó el entrenador quien afirma que "todo el mundo es consciente de la situación".
En el Burgos está cedido el rojiblanco Gaspar Campos que se ha convertido en el máximo goleador del equipo castellano y que no jugará este encuentro ya que es una de las cláusulas de su cesión. Sobre este jugador el técnico Miguel Ángel Ramírez reconoció que "su vuelta la próxima temporada no está decidida, pero si contemplada", que "es un jugador que puede ayudar mucho la próxima temporada" y que le gustaría "contar con él el próximo año".
Ramírez volvió a reiterar que "hay muchos ejemplos de clubes a los que el resultadismo les ha hecho perder el norte" y reconoció no saber "cuánto puede durar el proceso" para mejorar el club. "No hago cuentas; mis energías se centran en ayudar al equipo a poder ganar", concluyó Miguel Ángel Ramírez, que mañana ultimará sus planes para tratar de sacar algo positivo en Burgos en el primero de los dos partidos consecutivos fuera de casa que tiene a la vista el Sporting.