Marcelino, entre la ambición y la cautela con el Sporting: "Marcarse el ascenso como obligación se separa de la lógica"
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Marcelino está encantado con la ilusión que transmite el Sporting
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Cree que poner expectativas de ascenso pueden acabar siendo contraproducentes
Por razones obvias, y aunque su etapa en el Sporting fue muy breve, Marcelino García Toral es una de las personalidades más respetadas en el entorno del club rojiblanco. Tras su abrupto final en el Olympique de Marsella tuvo ofertas de equipos como el Sevilla, pero la acabó rechazando y ahora aguarda su próxima aventura. Eso sí, siempre pendiente del Sporting de sus amores.
El técnico de Careñes nunca se ha mordido la lengua a la hora de dar su opinión sobre asuntos de la actualidad rojiblanca, incluso lanzándole alguna que otra petición al Grupo Orlegi. Como no podía ser de otra forma, ha manifestado su opinión de la buena racha que atraviesa actualmente el equipo gijonés, aunque con cierta cautela.
Marcelino ha pasado el bisturí al equipo rojiblanco para hacer su particular análisis: "Todos los que somos sportinguistas nos alegramos mucho de cómo está el Sporting esta temporada. Está haciendo una campaña muy buena y sin un grandísimo desembolso. Futbolistas cedidos que han retornado y están muy bien, los fichajes son complemento de lo que ya había y vinieron para generar una estructura sólida".
En ese sentido, asegura que "el equipo está sólido atrás y encuentra con facilidad la portería rival. Es un equipo equilibrado, que juega bien y está teniendo muy grandes resultados. Vencer al Espanyol de forma convincente a estas alturas de la competición nos hace ilusionarnos a todos".
Marcelino y la presión de ascender para el Sporting
Pese a estar terceros en la tabla, Marcelino echa un poco de agua a los sueños de la afición y cree que la ambición de ascender puede acabar siendo contraproducente. "Yo sí que creo que tampoco debemos poner la obligación de ascender esta temporada. Creo que hay equipos que, a nivel económico, están por encima e hicieron más esfuerzos económicos. La ilusión y las buenas vibraciones nos mantienen a todos".
De hecho, no se atreve a vaticinar un posible ascenso porque "la Segunda División se hace larguísima y hay equipos que pueden reforzarse en enero y todo eso condiciona. Hay ejemplos como el Eibar, que consideramos que podría ascender y luego se te escapa por circunstancias. El fútbol es un juego y a veces te beneficia y a veces no".
Y concluye: "Marcarse el ascenso como obligación en el Sporting se separa de la lógica. Y esa obligación te lo hace aún más difícil. Mientras sea ilusión y veamos que el equipo nos hace disfrutar y competir, sacando buenos resultados, vamos a disfrutar del momento. Ojalá luego a final de temporada se consume el ascenso, que es beneficioso para el club, la ciudad y Asturias en general".