No hizo muchos fichajes el Sporting en el mercado estival. De hecho, el de Roque Mesa se confirmó ya en septiembre y aprovechando que el canario no había fichado por ningún equipo.
Ahora, a tenor de las declaraciones que Miguel Ángel Ramírez ha dado en 'La Pizarra de Quintana' de Radio Marca, podríamos decir que todo forma parte del plan de tener paciencia que el técnico canario quería implantar en el club.
De hecho, podría deslizarse que ha sido el propio técnico el que no quería fichar por fichar. Así podría deducirse por el mensaje que lanza a los jugadores que estaban en la cartera de la dirección deportiva.
"Cuando vienes al Sporting tienes que saber convivir con la presión. Cuando hablé con los que vinieron les dije que no todo el mundo puede jugar en El Molinón. Hay que saber afrontar la presión de jugar en un club gigante, si no, no vengas. Esa presión es la bonita, la que todo el mundo quiere tener. Prefiero sentir esa adrenalina a no tenerla".
Asimismo, Ramírez ha desvelado otra de las intrahistorias de su equipo. Y es que no tiene ningún reparo en que los jugadores le corrijan.
"Tenemos muchos jugadores en la plantilla a los que les gusta entrenar y jugar al fútbol que son mi extensión en los entrenamientos y en los partidos. Hablo del 'Cali', de Nacho Méndez, de Cote... Son gente a los que les gusta el juego. Y, como me gusta trabajar en equipo, no quiero imponer y que ellos lo hagan. Me gusta que sea preparado de manera conjunta. Se sienten libres de poder corregirme y de decirme 'oye míster, vayamos por aquí'. Es importante tener esa relación con el jugador", asevera.