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El estado físico enciende todas las alarmas

Álex López Sanfeliu

Es una preocupante obviedad. El Valencia CF no está bien físicamente y eso es algo que salta a la vista en partidos como el que el equipo disputó el pasado sábado en Mendizorroza tras haber hecho dos esfuerzos titánicos ante el Athletic pero sobre todo ante el Real Madrid. El bloque de jugadores arrastra un déficit en la preparación física heredada de anteriores etapas a lo largo de esta temporada producto de una planificación para un equipo diseñado para competir cada siete días y no cada tres como está ocurriendo en estas dos últimas semanas. 

Además, en según qué casos, el bajo estado de forma es más acusado. El Valencia CF acabó dejándose remontar en Mendizorroza porque ya no quedaban fuerzas en los últimos minutos de partido. Así coincidieron todos los protagonistas tras la finalización del encuentro. Voro dijo que no quedaba gasolina mientras que Enzo Pérez y Carlos Soler también incluyeron entre los principales motivos de la derrota ese cansancio físico. El cuerpo técnico tiene que lidiar con las lesiones, con la gestión de esfuerzos de sus jugadores y con un calendario elaborado a modo de capricho y sinsentido
El cuerpo técnico tiene que lidiar con las lesiones, con la gestión de esfuerzos de sus jugadores y con un calendario elaborado a modo de capricho y sinsentido. 
Tan comprometida es la situación que el equipo arrastra que la mayoría han tenido problemas en los últimos días. Tras las victorias ante el Athletic y Real Madrid, Enzo, Gayà y Mangala tuvieron que descansar. El argentino y el de Pedreguer acusaron el tiempo de inactividad anterior. De la misma manera, los dos fichajes de invierno, Orellana y Zaza, han tenido que ponerse al 100% a marchas forzadas. El italiano tuvo que ser sustituido después de 'pegarse' con toda la defensa del Madrid y Orellana ha seguido un plan específico de gestión de esfuerzos desde que llegó. Aún así, en Mendizorroza notó el cansancio y no estuvo acertado. Acabó desquiciado y fue expulsado en los últimos instantes. Algo parecido le ocurrió a Munir. El '9' finalizó el miércoles totalmente acalambrado y ante el Alavés estuvo lejos de su mejor nivel. 
No hay que olvidar que el equipo cuenta en estos momentos con cuatro lesionados y dos de ellos, Montoya y Nani sufren problemas musculares, producidos por la fatiga y el desgaste. 
Así pues, esto no son más diversas muestras que ponen en evidencia el estado físico de un equipo cuyo cuerpo técnico tiene entre algodones a sus jugadores pues son conscientes de todo lo que arrastran y todo lo que les queda por delante. Esta semana, el Leganés y el Atlético de Madrid. 

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