¿Qué pasa con Fran Villalba?
La situación que atraviesa Fran Villalba en la actualidad hay que catalogarla como incómoda y, en cierta medida, sorprendente. El Valencia CF ha vuelto a ratificar su idea inicial de considerar a Fran como uno de los futbolistas claves del Mestalla de cara a la próxima temporada; de hecho el club ya ha dicho a sus agentes que no va a escuchar ofertas de cesión de equipos de Segunda División que quieren contar con el joven futbolista de El Cabanyal. Ofertas hay y los equipos le aseguran jugar un mínimo de 20 partidos para que vaya soltándose como jugador profesional. El club, sin embargo, no lo lleva de pretemporada con el primer equipo, pero tampoco lo deja salir.
Fran cumplió el pasado mes de mayo 19 años y el Valencia busque proteger a una de las joyas de su cantera, pero a su vez es inevitable no acordarse de lo bien que se gestionó la cesión de una de las grandes joyas que dio Paterna, la de David Silva. El canario horneó su fútbol en los campos embarrados de Eibar y cambió el juego directo norteño por el de toque de la mano de Mendilibar. Hubo dudas entonces porque era muy arriegado que ese joven de 18 años saliera del cascarón en club cuya filosofía histórica era antagónica al de las características del jugador. Pero se esudió a la perfección la cesión, asegurándose bien incluso del perfil del entrenador que tendría de el de Arguineguín.
No irá a la pretemporada salvo milagro
Villalba tiene un año más que David en estos momentos y tiene la posibilidad de salir cedido para hacerse un 'hombre'; por cierto en el partido más importante del filial en los últimos 40 años, demostró en la media hora que tuvo, que sobresalió en un partido de los catalogados como calientes, un partido de agallas. Pero la idea que maneja el club es que Fran no sólo sea uno de los buques insignia del filial sino que tenga dinámica del primer equipo. Pero la pregunta es clara y concisa: ¿Qué dinámica del primer equipo se puede tener sin hacer la pretemporada con ellos? Tan sólo puede cambiar el rumbo de Fran, el propio entrenador del Valencia, Marcelino García Toral, ya que está más que decidido que Villalba no ponga rumbo a la estadía ché. Tan sólo la petición del técnico podría llevarle junto a sus seis compañeros del Mestalla. Fran lo tiene complicado, por no decir que imposible.
El ejemplo de David Silva
La valentía de la entonces dirección deportiva moldeó a David Silva. El canario era puro talento, pero también pura timidez. Su progresión en las categorías inferiores valencianista como en competiciones internacionales con España fue ejemplar y se le retuvo poco en la Segunda División B. Un caso similar al de Isco, al que le aburría esa categoría y en dos años en el futbol profesional le sirivieron para mostrar todo su potencial.
David Silva adquirió el sacrificio en Ipurúa, con viajes interminables en autobús y pudiendo ir a entrenar andando, sin los focos que pueden descentrar a los jóvenes. Ahora es Fran el que debe adquirir esas cosas intangibles que tienes fuera de casa: la lucha diaria, el adaptarse a una ciudad que no sea Valencia. A David le sentó fenomenal el salto al profesionalismo y hay que ver lo mismo en Fran Villalba. Sus demostraciones hace dos años en la Copa ante el Barakaldo y su juego alegre ante el Barcelona, se vieron frenados en seco en una temporada, la pasada, en la que no tuvo la presencia que se esperaba. Por el momento, la progresión de Fran está en punto muerto y eso es demasiado peligroso.