Las vacaciones del 'auto-control'

El Valencia CF está de vacaciones desde este viernes tras el último entrenamiento del curso. Por delante se presenta mes y medio aproximadamente para descansar y desconectar del frenesí de la competición que este año ha sido muy dura y exigente pero que ha finalizado con el éxito para el valencianismo ya que el club de Mestalla ha conseguido el billete para la próxima edición de la Liga de Campeones. 

El equipo volverá al trabajo para preparar la nueva temporada entre el 6, 7 y 8 de julio. Será entonces cuando tendrán lugar las pertinentes pruebas médicas físicas que determinen en qué estado se encuentra cada uno de los futbolistas y si se han 'portado bien' o no. Los jugadores dirigidos por Marcelino no se pondrán las botas hasta el martes día 10 cuando empiecen los entrenos en el campo, antes los responsables tienen que recabar todos los datos necesarios para que la preparación sea óptima.
En este sentido, el cuerpo técnico ha marcado unas pautas, que no obligaciones, para que los futbolistas tengan unas rutinas adecuadas en todo este tiempo de desconexión y lleguen a la pretemporada como 'toros'. Cada futbolistas tiene un peso específico marcado el cual no puede rebasar. La profesionalidad de cada jugador debe ser la principal vara de medir para que no echen por tierra todo el trabajo tanto físico como alimenticio desarrollado en la primera campaña de Marcelino al frente del equipo. 
No hay un plan físico específico para cada jugador. Por lo general, cada futbolistas es libre de realizar la actividad física que crea oportuna. El cuerpo técnico no ha marcado actividades con obligatoriedad sino más bien, ha hecho recomendaciones como salir a trotar o juegos de raqueta. 
Otros en cambio, como Murillo, sí seguirán un plan específico marcado pero en su caso concreto, el trabajo extra responde a la necesidad que tiene el clolombiano de reforzar su zona del pubis tras la grave lesión sufrida esta pasada temporada.