La clasificación para la Champions League conseguida la temporada pasada, el abono total y los refuerzos llegados este verano, han desatado la ilusión del valencianismo que, en este comienzo de temporada, ha acudido a Mestalla en masa. La entidad de los rivales y las ganas de ver ganar al equipo se han sobrepuesto a las decepciones cosechadas por los de Marcelino en casa. No en vano, y aunque resulte paradójico, este año que el Valencia aún no ha conseguido anotarse la primera victoria en casa, acuden más aficionados al Mestalla que en los años anteriores.
Así, en un estudio que publicaba el Valencia esta semana en su página web se podía comprobar como más de 5.000 espectadores más con respecto a la 2017-18 ante Atlético, Betis, Celta y FC Barcelona, la mejor entrada de la campaña. Y es que, 46.249 espectadores se dieron cita en el empate a un gol contra el vigente campeón de Liga.
Los datos de asistencia de Mestalla estos primeros partidos demuestran que la apuesta por el abono total fue un éxito. Los números no engañan:
Ante el Atlético de Madrid asistieron 46.174 espectadores
Ante el Betis asistieron 40.050 espectadores
Ante el Celta asistieron 35.495 espectadores
Ante el FC Barcelona asistieron 46.249 espectadores
Estos guarismos indican que, ante los mismos equipos, visitaron Mestalla 5.135 seguidores más que la pasada campaña y 11.676 más que en la edición 2016-17.
Mestalla está lleno de aficionados-soldado pero ha dejado de ser un fortín
En la Liga de Campeones, como no podía ser de otra manera, se mantiene esta tendencia. Así, en el estreno en la Champions ante la Juve, el Camp de Mestalla registró una asistencia de 46.067 espectadores, muy cerca del récord que, de momento, lo ha establecido el Barça este domingo pasado.
Con todo, y aunque comercial, social y económicamente estos registros sean un éxito, falta lo más importante, que es que el equipo empiece a acumular victorias en su feudo. De momento, los de Marcelino suman cuatro empates en Liga y una derrota en Champions. La tendencia debe invertirse ya. Mestalla está lleno de aficionados-soldado pero ha dejado de ser un fortín.