Poco a poco Gonçalo Guedes se acerca a su mejor versión. El portugués fue titular con el Valencia CF por primera vez desde que se recuperara de su lesión y todavía no brilló al nivel de la temporada pasada, pero empieza a ser un jugador más reconocible.
Primero porque jugó en la banda izquierda, su hábitat natural durante el curso anterior, y, segundo, porque no estuvo tan ansioso como ante el RCD Espanyol el pasado fin de semana.
Salió de inicio, quiso el balón, lo pidió y arriesgó en cada acción. Siempre valiente, siempre buscando a su marcador para encararlo y hacer daño. Esa verticalidad tan característica del portugués no tardó en generar rédito para el conjunto valencianista.
Primero forzó una cartulina amarilla para Scott Brown, capitán del Celtic de Glasgow, mientras que a los 37 minutos provocó la expulsión de Toljan. El portugués enfilaba el área escocesa con velocidad y el alemán no tuvo más remedio que frenarlo en falta. Fue la segunda amarilla y, por lo tanto, fue expulsado.
Durante la segunda parte continuó buscando constantemente generar peligro y hacer daño a la defensa del Celtic. No logró marcar, pero fue desequilibrante. En total, Guedes tocó 81 balones, completó dos regates con éxito y fue objeto de cinco faltas.
Además, hizo un tiro, que fue bloqueado por un defensa del Celtic, y completó el 88% de los pases que intentó.
En cualquier caso, más allá del rendimiento que ofreció con balón, la mejor noticia es que Gonçalo Guedes pudo jugar los noventa minutos. Eso significa que el portugués está alcanzando el momento de forma indicado y que llega en el punto álgido de la temporada, cuando el Valencia CF afronta las semifinales de la Copa del Rey, acelera por la cuarta plaza y está en el sorteo de octavos de final de la Europa League.