La lección de Álex, el aficionado que devolvió la entrada perdida para Sevilla

El reparto de entradas para la final de la Copa del Rey ha llevado de cabeza a miles de aficionados valencianistas ansiosos por tener una parte de ese preciado tesoro y poder acompañar así al Valencia CF en la final del próximo 25 de mayo. Historias, anécdotas, desvelos y detalles hay muchos. De entre todos, ElDesmarque Valencia ha reparado en uno que, sin duda, emociona y demuestra la grandeza de las personas que, como Alejandro Monsell, -Álex para su familia y amigos-, se convierten sin comerlo ni beberlo en un ídolo momentáneo de masas. Él se encontró una entrada, en el suelo, no nominativa, que necesitaba para ir a Sevilla acompañado y, ni corto, ni perezoso, removió Roma con Santiago para encontrar a su propietario y devolverla.

Toda la historia se destapó en redes. Un tuit del propio Alejandro Monsell, después de una serena reflexión interior, le haría pasar del anonimato a ser uno de los valencianistas más reconocidos en la previa de la Europa League.

El propio Álex explica a ElDesmarque cómo sucedió la cosa. El lunes, después de llevar a su hija pequeña a hacer deporte, le tocó ir al cajero para pagar las clases. Era el cajero de una población de L'Horta, La Cañada. Muy alejada de donde se distribuían las entradas. Él, que tiene entrada después de que le tocaran una de las últimas 1529 que sacó el Valencia CF a la venta, no había visto como eran físicamente pero, enseguida, la reconoció.

Y quizá no le falte razón y en esta sociedad, por escasos, damos importancia a gestos que debieran ser comunes.

"Las había visto las entradas en twitter, pero no sabía cómo era. Al encontrármela me dio una gran alegría, pero enseguida pensé ¡Qué putada para el que la haya perdido con el viaje y el hotel pagado!", explica Álex. "A mí me hacía papel, para llevarme a mi hijo, pero pensé en ese pobre seguidor y llamé al Valencia CF. Allí me explicaron cómo devolverla y es lo que hecho. Acercarme a las oficinas para que ellos se la hagan llegar", contaba con normalidad Álex. "Si me hubiera pasado a mí, es lo que me hubiera gustado que hicieran conmigo". Y quizá no le falte razón y en esta sociedad, por escasos, damos importancia a gestos que debieran ser comunes.

Valencianista de toda la vida, aficionado acérrimo, irá a la final de Sevilla y lo hará con la conciencia tranquila por el deber (moral) cumplido y como miles de likes y retuits por su acción.