El legado de Santi Mina

Santi Mina, que este miércoles se ha despedido de sus compañeros en la Ciudad Deportiva de Paterna para irse a firmar su nuevo contrato se marcha a Vigo, vuelve a casa pero deja un vacío enorme en la afición valencianista por su carisma, su predisposición y su entrega en el terreno de juego más que por sus estadísticas.

Tras el acuerdo sellado desde el pasadio jueves; mediante el cual, el fichaje de Maxi Gómez por el Valencia CF implica la marcha de Santi Mina y Jorge Sáenz al Celta de Vigo, el gallego y la afición valencianista han comenzado mentalmente a despedirse de un futbolista que se marcha tras cuatro temporadas en Valencia CF en las que ha crecido. Vino a cambio de su cláusula, siendo todavía un niño, -diez millones de euros-, y se marcha por el doble.

Nunca fue titular indiscutible, pero siempre marcó

En estas cuatro temporadas nunca tuvo el puesto de titular asegurado. De hecho, siempre fue el revulsivo, pero siempre cumplió. 42 dianas en los 149 partidos que intervino (menos de cien como titular) lo avalan. Eso y 14 asistencias.

Sus mejores registros fueron con Marcelino. En sus dos últimas campañas anotó 15 y 13 goles. El doble que en las dos primeras.

Se lleva una Copa en la piel

Santi Mina es un futbolista y una persona que va de cara, sin ambages, apasionado de todo lo que hace y que cumple lo que promete. La última de ellas, tatuarse la Copa del Rey en su piel.

Santi Mina hizo pública su intención de tatuarse la Copa. Fue justo unos días antes de la final. "Tengo claro que me haré un tatuaje con la Copa. La Copa estará en mi cuerpo. Es mi primera final.  Que la gente tenga claro que vamos a dejarnos el alma en los últimos 90 minutos de la temporada", anunciaba el gallego que logró el título y que ya ha cumplido y que pone fin a su etapa en el Valencia, donde siempre se le recordará con cariño.

Santi Mina fue siempre de cara

El gesto tampoco puede sorprender ya en Santi Mina, un futbolista que siempre fue de cara y que lleva desde el jueves con la mente en Vigo. El propio delantero fue el primero en reconocer públicamente sus preferencias sin esconderse. "He jugado Champions, he ganado un título con el Valencia y he marcado goles en Champions, pero al final un futbolista lo que quiere es jugar, salir todos los domingos al césped y darlo todo. Y el interés que está mostrando el Celta por mí es grandísimo. Esa es mi casa, si he llegado al Valencia ha sido gracias al Celta. Si al final se dan las cosas lo daré todo para demostrarle que no se han equivocado", declaró. Fue días antes de estrenarse en Paterna como un jugador más y de despedirse del equipo este miércoles. Es un legado que deja a las claras lo que es Santi Mina, un ariete que va de frente.