El entrenador del Valencia, Marcelino García Toral, señaló en la rueda de prensa previa al partido de la primera jornada de LaLiga ante la Real Sociedad que la noticia del posible traspaso de Rodrigo Moreno al Atlético supuso un golpe al trabajo del equipo que trasmitió intranquilidad e inseguridad al grupo.
"Es imposible llegar al máximo nivel al primer partido de Liga. Todos quedamos ilusionado del nivel mostrado ante un rival como el Inter. Luego durante la semana recibimos un golpe y no cabe duda que transmite intranquilidad e inseguridad al grupo lo que hizo que no entrenamos como me hubiera gustado", confesó.
"Rodrigo fue un futbolista que en un momento puntual estuvo traspasado, así me lo comunicó el club y el propio futbolista, que se había cerrado un acuerdo con el Atlético y luego ese traspaso no se consumó. A partir de ahí, Rodrigo quiso volver a entrenar, su forma de actuar le honra", explicó.
"Él nunca me pidió a mi salir del Valencia, eso lo quiero dejar muy claro, e intentamos dentro de lo que cabe volver a la normalidad. Su predisposición es total, algo que le alaba, es un gran profesional y extraordinaria persona, agradecido al valencianismo, sus compañeros y cuerpo técnico", añadió.
Sobre la posible convocatoria del delantero internacional español para el primer partido de Liga ante la Real Sociedad, Marcelino señaló que tras el entrenamiento de esta tarde hablarán y tomará una decisión al respecto.
Tras todo lo sucedido esta semana, apostó por "volver a lograr la estabilidad y la tranquilidad para desde ahí ser más competitivos y mas regulares que la pasada campaña".
"Podría estar más tranquilo, es evidente, porque hay procesos de inestabilidad, que como iba el coche de lanzado, se podían haber evitado, es lo que pienso. Para la plantilla, que es la que juega y rinde, creo que la tranquilidad y la estabilidad son dos normas de comportamiento que influyen de manera decisiva en el resultado", agregó.
Respecto a la Real Sociedad, comentó que "jugamos contra un muy buen equipo, que conserva la mayoría de jugadores de la pasada temporada pero en el aspecto ofensivo se ha reforzado con muy buenos jugadores. A nivel defensivo nos a va exigir un nivel muy alto".
"La temporada pasada nos dio problemas aquí y nuestra única idea es afrontar el partido sabiendo que es muy importante empezar la competición en casa ganando y pedimos el apoyo del público para internar sumar los tres puntos y colocarnos ya en al parte altita de la tabla, añadió.
El técnico apuntó que a casi 24 horas del partido sigue sin saber si podrá contar con Dani Parejo y Jose Luis Gayà, a la espera de conocer la decisión del CSD sobre el indulto dador por la RFEF a los que arrastraban sanción de la pasada campaña.
Preguntado por el refuerzo que le falta para dar por cerrada la plantilla, reconoció que el jugador elegido es el barcelonista Rafinha, al que tenían prácticamente fichado pero por el que ahora negocian para conseguir sus servicios en forma de cesión y no de fichaje.
"Desde el principio del verano queríamos un futbolista ofensivo polivalente para reforzar la plantilla. Rafinha era un futbolista que nos podía ayudar a aumentar el potencial. Estuvo prácticamente fichado, luego nos fuimos a Singapur y allí el propietario nos dio argumentos, que nosotros entendimos, para no hacer ese fichaje por su historial de lesiones importantes", relató.
"También nos aseguró que si el futbolista venía en calidad de cedido aceptaría que formara parte de la plantilla y en ese escenario estamos de intentar que el futbolista venga cedido, si se diera esa circunstancia podría ser jugador del Valencia. Dadas las condiciones de mercado, cualquier jugador de nivel similar el mínimo costo son 40 millones y por eso creemos que sería una buena opción", concluyó.