Quizá no sea el día para sacar pecho o dar lecciones de nada tras el bochornoso e irresponsable espectáculo que algunos padres y sus hijos han protagonizado en Valencia saltándose las mínimas normas de sanidad exigidas para el primer día de salida con los niños. Espero que el peso de la ley, ya que el de sus conciencias parece muy laxo, caiga sobre esos cafres. Con todo, voy a lo mío, que es el fútbol. Y en esas, videoharlando el otro día con unos buenos amigos con los que antaño formé una gran tertulia radiofónica (Juan Carlos Cebrià, Carlos Egea, Luis Urrutia y Javi Doménech) debatíamos sobre la importancia de la vuelta al fútbol. Todos hablábamos del Valencia CF y del Levante UD y, aunque convinimos que la situación del país es dramática con la cantidad de miles de fallecidos por el coronavirus, también llegamos a una entente que sostengo firmemente: es bueno que vuelva el fútbol y que, además, lo haga cuanto antes mejor (respetando siempre las condiciones sanitarias exigibles).
Entiendo a aquellos que piensan que es secundario y que es incluso una barbaridad pensar en el deporte rey cuando las noticias sobre contagiados, fallecidos y hundimiento económico ocupan la mayor parte de los informativos de este país. Pero en esos dos ámbitos: el sanitario y el económico el fútbol tiene mucho que decir. En el primero porque, al margen de la salud física, está la salud mental. Ahí el regreso a la competición ayudará a muchos españoles a distraerse y alejarse de la triste realidad que nos asola. El segundo, el económico, también. El fútbol supone el 1% del PIB de este país y, mucho o poco, no creo que la economía esté para ir permitiéndose que sectores tan super profesionalizados como este no se pongan en marcha cuanto antes.
Lo que me parece indigno es que nos cabreemos y nos pongamos estupendos porque LaLiga ha conseguido tests para los jugadores en vez de poner el foco en los que no consiguen las pruebas masivas para los ciudadanos y así poder saber de verdad si estamos contagiados o no y cuántos.
Tengo claro que será un fútbol distinto, pero moverá el alma igual, despertará pasiones, nos enfrentará y nos unirá.... Al margen que en términos competitivos permitirá que el Valencia CF demuestre si de verdad merece ir a Europa o no. Está claro que la salud es lo más importante, pero después de eso hay que procurar ser felices, salir cuanto antes de este atolladero y el deporte nos ayudará. Estoy convencido. Pero, fíjate como será la cosa que, hasta el Gobierno, la Federación y LaLiga se han puesto de acuerdo y han llegado a un principio de pacto para que vuelva. Todo lo que sea regresar a la normalidad será bienvenido. Feliz semana.
David Torres
Delegado de ElDesmarque en Valencia