El colectivo Últimes Vesprades a Mestalla, en su labor de revitalización de la memoria del Valencia CF, ha rendido este sábado un sentido homenaje a la figura de Vicente Peris, sin duda una persona capital en la historia de la entidad. Vicente Peris entró al Valencia CF en 1939 como botones cuando tenía 16 años. Ocupó diversos puestos de responsabilidad en el club valencianista y su inestimable trabajo ayudó a la consecución de títulos a los largo de más de 30 años. En 1969 accedió al cargo de gerente y fue uno de los artífices de la buena marcha del club que conquistó la Liga en 1971, la primera 'liga moderna' del Valencia CF. Por ese motivo, este sábado en el cementerio municipal de Valencia, una representación del mencionado colectivo ha colocado una corona de flores en la tumba del insigne valencianista en la que se podía leer: "Vicente Peris, ànima i cor del VFC" (Vicente Peris, alma y corazón de Valencia FC, con las siglas de su primera denominación).
Ha sido, según relatan los presentes un acto emotivo en el que se ha leído el último texto que escribió de su puño y letra Vicente Peris y que iba incluido en el programa de mano que se repartió el día de su muerte.
La historia del Valencia CF no se puede comprender sin la figura de Vicente Peris Lózar, que falleció a los 48 años de edad, un 13 de febrero de 1972. Fue de un infarto, curiosamente producido un partido Valencia-Atlético de Madrid como el que este viernes se celebra en Mestalla.
A Peris se le sigue recordando, e idealizando, como el gerente perfecto porque los que le conocieron aseguraban que "Vicente Peris era el Valencia", la propia esencia del Valencia CF y durante las más de tres décadas que estuvo al servicio del club de Mestalla, hizo gala de la pasión desmesurada y el amor incondicional a unos colores, los del Valencia CF.
Su vida se apagó en Mestalla el 13 de febrero de 1972. fue minutos después de un duelo contra el Atlético de Madrid en el que, como ahora, el Valencia CF necesitaba imperiosamente la victoria. La tensión del duelo provocó que empezara a encontrarse mal durante el choque, que lo vio como siempre en su localidad. "Siempre veía los partidos en su silla o en el banquillo, nunca en el palco", explicaba su hija Merchina a ElDesmarque Valencia. Su corazón no pudo aguantar y un infarto puso punto y final a su periplo en este mundo. Hoy habría cumplido 97 años, justo en el momento en que se cumplían 81 de su entrada e