La buena imagen que dejó Adrián Guerrero el pasado sábado en el Nuevo Los Cármenes en su primer partido con el Valencia CF fue una gran carta de presentación que le permitió ganarse la confianza de Voro para el siguiente partido. Sin Jaume Costa al 100%, el técnico de L'Alcúdia volvió a apostar por el canterano para el costado zurdo del esquema táctico.
Adrián Guerrero se mostró muy dinámico y participativo durante la primera mitad. Participó en la elaboración del juego gracias a su vocación ofensiva junto a la línea de cal. En defensa, el canterano estuvo correcto y aguantando bien a su par. No desentonó en absoluto y robó algunos balones divididos que ayudaron al equipo.
En líneas generales, el futbolista catalán rayó a buen nivel durante el primer tiempo aunque tuvo algún despiste del que el Valladolid se aprovechó. En el 26' Waldo Rubio consiguió rematar un balón aéreo colgado en el segundo palo en el que Guerrero perdió la marca y dio facilidades al jugador vallisoletano.
En la reanudación, Adrián Guerrero vio muy de cerca la acción de Víctor García ante Diakhaby. El delantero controló, se giró y disparó ante central francés y Guerrero, al que no le dio tiempo a tapar.
En algunas ocasiones, Guerrero acusó la diferencia de ritmo que es evidente entre Primera División y la Segunda B, sobre todo en acciones en las que el lateral zurdo fue presionado.
La entrada de Hervías en el terreno de juego incrementó los problemas para Guerrero pues el Valladolid cargó por el costado diestro aprovechando la velocidad del extremo. En el 70', Adrián vio la primera amarilla del encuentro tras arrollar al propio Hervías.
Adrián Guerrero sufrió como el resto de sus compañeros el aluvión del Valladolid en la recta final del encuentro. Se vació y sus gemelos dijeron basta a pocos minutos de finalizar. Fue sustituido en el 82' por Denis Cheryshev.
Los vallisoletanos estuvieron muy cerca de marcar antes del gol definitivo de Kangin Lee pero los valencianistas aguantaron para llevarse un triunfo balsámico.