El Valencia CF apura los últimos días de mercado sin haber realizado todavía ningún fichaje. El club pasa por una difícil situación económica y, aunque se necesitan refuerzos, no parece que se quiera hacer ningún gran desembolso. Son muchos los futbolistas que han sonado para reforzar la plantilla, pero todavía no se ha concretado ninguno. Los blanquinegros tienen muchos huecos que rellenar y, hasta ahora, se han tenido que tapar con jugadores del filial. Con las dificultades encontradas para llevar a cabo fichajes, el Valencia CF pasa a una nueva fase. Es el tiempo de Jorge Mendes, que desde que Peter Lim se hizo con la mayoría accionarial, tiene por costumbre hacer transacciones con los de Mestalla sobre la bocina.
A nadie se le escapa que Jorge Mendes guarda una estrecha relación con Peter Lim y, por ende, está muy involucrado en el apartado deportivo del Valencia CF. Varios fichajes y salidas han tenido el sello del agente portugués y es esperable que este verano no sea una excepción. Aderlan Santos, Mangala, Garay, Correia, Negredo, Abdennour, Guedes... Todos estos fichajes tuvieron de forma directa o indirecta la participación de Gestifute. En la avenida de Suecia todavía no se han hecho fichajes y, ahora, Mendes mueve sus hilos.
Cuando Meriton decide tomar el control de la dirección deportiva, parece que la seguridad defensiva se esfuma. Todos los clubes tienen uno o varios agentes de referencia, unos intermediarios con los que la relación es más fluida. En el Valencia CF ese hombre es Jorge Mendes y, para bien o para mal, es el encargado de animar las últimas horas de mercado.
En la 2015/2016, después de una magnífica temporada donde el club clasificó a Champions y se igualó el récord de puntos de Benítez, el equipo se quedó sin su mejor futbolista: Nicolás Otamendi. Para ocupar la posición de zaguero titular Mendes gestionó la llegada de Abdennour (un fichaje que ilusionó a la afición) y ya de paso colocó a Aderlan Santos. El Valencia CF fue un coladero en defensa, el tunecino pasó a la historia como uno de los fichajes más ruinosos y Santos dio un nivel incluso peor del esperado.
En la siguiente temporada, las cosas fueron todavía más obvias. Con García Pitarch como director deportivo el equipo llegaba a las últimas horas de mercado sin centrales de garantías y con Mustafi en el Arsenal. Aunque ese año fue peor que el anterior y se volvió a coquetear con el descenso, los negocios con Mendes fueron más lucrativos para el Valencia CF. Más allá de los números, donde los blanquinegros pagaron un sobreprecio por Garay, tanto el argentino como Mangala dieron un buen nivel individual dentro del paupérrimo nivel de la plantilla. El francés acabó su cesión como uno de los mejores futbolistas de la temporada y Garay, aunque no entró con buen pie, acabó dando un gran rendimiento a las órdenes de Marcelino.
Cuando Peter Lim llegó a Valencia, todo era alegría y promesas que buena parte de la afición aceptó como verdades. Un futuro donde se rozase la Champions, un estadio de primer nivel y estrellas jugando como locales en Mestalla. Tras un mercado movido en el que Rufete traía la base y Mendes los "galácticos", el Valencia CF necesitaba un delantero que reventase el mercado. Nuno lanzó las campanas al vuelo: "Va a llegar la bomba". Jorge Mendes traía a Álvaro Negredo, futbolista del City y primer fracaso de la era Meriton. Misma situación se produjo en el año del centenario, el Valencia CF quería a Guedes a toda costa después de su genial irrupción en la 2017/2018. La transacción parecía imposible, pero Mendes lo desatascó todo y el extremo se convirtió en el fichaje más caro de la historia del club.
Mendes ha estado involucrado en el Valencia CF desde que Meriton se hizo con la mayoría accionarial. También en la etapa de Mateu Alemany. La diferencia se produce cuando no solo se dedica a fichar las guindas de la plantilla y se convierte en el encargado de crear la columna vertebral del equipo. El año pasado fue Correia, casi sin experiencia en el fútbol profesional y que tenía que cubrir el puesto de lateral después de que Piccini se lesionara. Ahora, sin fichajes y con Gracia pidiendo refuerzos, llega el momento de que Jorge Mendes intervenga en un mercado en el que el Valencia CF, ya sea por falta de intención o de recursos, no ha sido capaz de contentar las peticiones de su entrenador.