Enfrentarse al Real Madrid siempre es complicado. Con bajas o sin ellas los merengues son uno de los rivales más complicados de Europa. En la jornada 9, además, los de Javi Gracia vieron cómo el encuentro se le ponía cuesta arriba desde antes de saltar al campo. El colegiado elegido era Gil Manzano, Un viejo conocido de los ches y que en el partido frente al Celta ya perjudicó al Valencia CF. Aun así, los blanquinegros pudieron olvidarse del extremeño, capitaneados por Gayà supieron presionarle y, a diferencia que en otras ocasiones, el VAR decantó la balanza para los de la Capital del Turia. Penaltis, repetición de pena máxima y un gol fantasma.
La afición del Valencia CF temía que, como ya había ocurrido en otras ocasiones, Gil Manzano perjudicara a los de Mestalla con sus decisiones. Sin embargo, el extremeño acertó y, a diferencia de en anterior partidos, a favor de los de Gracia. Pese a ello, si el VAR no hubiera intervenido, la historia habría sido distinta.
4-1 Valencia-Madrid Minuto 62. Otro gol de penalti de Soler.
Gil Manzano es el primer árbitro que pita 3 penaltis en contra del Madrid en un partido de Liga (todos marcados por Soler).
— Pedro Martin (@pedritonumeros) November 8, 2020
Los valencianistas comenzaron perdiendo después de que Benzema conectara un disparo que se envenenó tras rebotar en Guillamón. Pero en el minuto 29 Lucas Vázquez acudió al rescate. En cinco minutos, el extremo reconvertido en lateral cambió la cara al partido, para desgracia de su equipo. Tras un centro tocó el balón con la mano y Gil Manzano señaló el punto de penalti. El VAR lo revisó y lo confirmó. Carlos Soler erró, fue a por el rechace y tras rebotar en el palo Yunus anotó. Tocaba revisarlo y, aunque Musah estaba dentro, Lucas Vázquez también lo estaba. Había que repetirlo y, esta vez, el canterano no falló.
En la segunda parte más de lo mismo. Soler firmaba un hat trick de goles y Gil Manzano una tripleta de penas máximas señaladas. Primero Maxi Gómez se adelantaba a Marcelo, que lo arrollaba y el colegiado, tras confirmación del VAR, señalaba un nuevo penalti. Tampoco lo fallaría. Minutos después Ramos robaba el balón con las manos, cual jugador de baloncesto. El árbitro no lo señaló, el uruguayo iba directo a por él. El VAR volvía a intervenir y el mediocampista volvía a anotar.
Gil Manzano estuvo valiente, pero, sin la intervención del VAR, el resultado hubiera sido distinto. El gol de la remontada del Valencia CF no subió al marcador en un primer momento. Hubo que esperar a que el videoarbitraje (España no cuenta con tecnología de línea de gol) revisara la jugada y confirmara que el balón sí entró.
En el segundo tiempo más de lo mismo, el tercer penalti no fue señalado, pero los jugadores de Javi Gracia lo tenían claro. Sergio Ramos había tocado el balón con la mano y, aunque nadie se lo podía creer, el Valencia CF acudiría otra vez a los once metros. Gil Manzano y el VAR hacían historia, nadie había pitado tres penaltis al Real Madrid en un partido de LaLiga.