Javi Gracia, nacido en Pamplona, se reencuentra este jueves con el equipo de su vida en el partido que enfrenta a Valencia CF y CA Osasuna correspondiente a la jornada 19 de LaLiga Santander. Aunque no llegó a debutar con la elástica rojilla, el actual entrenador valencianista pasó por las inferiores del club navarro y llegó a ser técnico de la entidad durante la temporada 2013/14, en la que se consumó el descenso a la categoría de plata del fútbol español. La vida futbolística y personal de Gracia siempre estará ligada al Osasuna independientemente de los resultados que consiguiera en su etapa allí. Detrás del técnico hay un profesional del fútbol que traslada sus pasiones al campo de juego y al banquillo. Desde ElDesmarque Valencia repasamos las tres curiosidades que unen al club rojillo y al técnico navarro.
Creció en una familia en el que sus padres estaban muy ligados a la educación: él era inspector y ella profesora. Javi sacaba buenas notas, aunque las de su hermano eran mejores. Sin embargo, el día que fueron a hacerse las pruebas en Osasuna, fue él quien consiguió entrar en el club navarro ya que el hermano pequeño se quedó en un cumpleaños.
Más tarde, le llegó la oportunidad de marchar a las inferiores del Athletic Club, club en el que no llegó a debutar. Su carrera futbolística se debatió entre otros equipos como el Valladolid, la Real Sociedad o el Villarreal.
En la temporada 2011/12, Gracia consiguió un ascenso a Primera con el Almería, pero no llegó a un acuerdo con el club andaluz y se quedo sin equipo. En septiembre de 2013 le llegó la oportunidad de volver a casa y entrenar al Osasuna. No lo dudó.
Las cosas no le salieron bien. Un equipo que vivió gran parte de la temporada fuera de la zona de descenso acabó bajando a Segunda. Con 39 puntos, se quedo a solo uno de la salvación. Gracia decidió no seguir al frente del conjunto de El Sadar.
Aunque han pasado siete años de aquella temporada en la que Gracia entrenó al Osasuna, aún son dos los hombres que permanecen en el club navarro desde entonces. Los actuales dos capitanes: Oier Sanjurjo y Roberto Torres.
Por aquel entonces, el primero todavía tenía 27 años, mientras que el segundo, 24. Ahora, con siete años más y la experiencia de dos ascenso a sus espaldas, ya llegan a los 34 y los 31, respectivamente.