Gayà y Cheryshev no pudieron acabar el partido de El Sadar junto a sus compañeros. El Valencia CF los mima para que estén listos ante el Real Madrid.
El Valencia CF ha vuelto este lunes al trabajo con la moral por las nubes después de la contundente victoria por 1-4 en El Sadar ante Osasuna. El equipo colidera la tabla junto al Real Madrid, próximo rival, tras cuatro jornadas de LaLiga Santander disputadas. Como es habitual, los titulares ante los navarros hicieron una sesión más suave que el resto y, tras media hora en el vestuario con sesión de vídeo incluida, salieron al césped todos menos los dos zurdos. Las primeras sensaciones que Gayà sí pueda llegar al partido del domingo contra los merengues pero el ruso parece que lo tiene más difícil.
El propio Bordalás efectuaba el viernes una primera previsión. "Cheryshev no estaba cómodo, notaba una molestia en la rodilla, lo hemos tenido que cambiar y confiamos en que no sea una lesión importante. Los síntomas no eran buenos, pero confiamos en que no sea importante, ahora estaba mejor. Gayà en el vestuario se ha enfriado y el gemelo se le ha contraído. Estaba contracturado, lo han estado tratando, no le era posible continuar y lo hemos cambiado también". Finalmente parece que el ruso no podrá llegar y sería baja.
En el lado positivo de la balanza está Piccini, que ha superado sus molestias y ha vuelto al grupo sin problemas.
Cheryshev se rompió en el descuento de la primera mitad del partido que enfrentaba a CA Osasuna y Valencia CF correspondiente a la jornada 4 de LaLiga Santander. Era el minuto 46 cuando se ha quedado tendido en el suelo tocándose su rodilla izquierda. Ni el ruso ni José Bordalás lo han dudado. Y es que el valencianista se ha retirado del campo y ha sido Dimitri Foulquier el que le sustituido para debutar con la elástica blanquinegra. A falta de pruebas médicas que confirmen de qué grado es la lesión, Cheryshev se puede perder este tramo de la temporada en el que el Valencia CF se la juega por partida triple, más allá del choque para confirmar sensaciones en El Sadar.
Un minuto después fue Gayà, ya dentro del vestuario quien, al quedarse frío, decidió tras hablar con los galenos de la entidad no seguir forzando su lesión.