Una hora y media antes de comenzar el encuentro ante el Elche CF saltó la sorpresa. José Bordalás, positivo por coronavirus, no podía sentarse en el banquillo para el encuentro correspondiente a la jornada 17 de LaLiga Santander. Patricio Moreno, su segundo, era el encargado de dirigir al Valencia CF. De inicio, Moreno sacó una 4-4-2 con Maxi Gómez y Gonçalo Guedes en punta. Ante la baja de Alderete por coronavirus, colocó a Guillamón de central.
Por su parte, Patricio Moreno estuvo en contacto con Bordalás durante el encuentro: "Me quedo con todas las instrucciones. Tratamos de que el equipo sea atrevido, valiente, ser verticales cuando corresponda. Y también ser un equipo intenso. Además, también Bordalás iba dando órdenes respecto a los cambios", ha explicado en rueda de prensa.
A las primeras de cambio tuvo que mover el banquillo ante la lesión de Toni Lato en el minuto 20. En su primera decisión comprometida, introdujo a Cristiano Piccini en el terreno de juego. Por tanto, Foulquier pasó al lateral izquierdo y el italiano se quedó en el lateral derecho. Así pues, Moreno no utilizó a Jesús Vázquez para el lateral izquierdo pese a tenerlo en el banquillo.
Inmediatamente después de la lesión de Toni Lato, llegó el gol de Gonçalo Guedes que abría el marcador. Además de celebrarlo, Moreno mandó instrucciones a sus jugadores. De hecho, llamó a Hugo Guillamón para darle indicaciones tras el gol. Se le vio muy activo, gesticulando e imprimiendo energía al equipo, de manera similar a José Bordalás.
Cuando el cansancio fue haciendo mella en las piernas de los futbolistas del Valencia en la segunda parte, Moreno dio ánimo y reconoció el esfuerzo de los jugadores. Cinco minutos después del gol de Lucas Boyé, Moreno introdujo un triple cambio en busca de los tres puntos. Cheryshev, Koba y Marcos André entraron en el terreno de juego por Guedes, Hélder Costa y Daniel Wass.
Y lo consiguió. El partido se revolucionó y apareció Cristiano Piccini para darle los tres puntos al Valencia. Patricio Moreno celebró el gol con rabia, aunque, con la cabeza fría, siguió dando órdenes a los suyos en aras de preservar el resultado y la importante victoria. En el 88', ante el cansancio de Hugo Duro, sustituyó al delantero madrileño por Yunus Musah. Tres puntos vitales para la pelea por Europa.