Más vale pájaro en mano que ciento volando. Eso mismo es lo que debe pensar José Bordalás a lo largo de esta primera mitad del mes de enero. Que el Valencia necesita fichajes para afrontar la segunda mitad de LaLiga Santander y las próximas rondas de la Copa del Rey es una evidencia pero también es una realidad que todavía no ha llegado ningún refuerzo a estas alturas y José Bordalás se ha visto obligado a asumir una postura de fuerza. El alicantino ha cortado la posible salida de Daniel Wass al Atlético de Madrid, así como la de cualquier futbolista que sea importante. El míster no ve nada claro cómo se está desarrollando el mercado de fichajes en el Valencia y, de momento, no le convencen las opciones que le han puesto encima de la mesa e insiste por Aridane. Sin embargo, si el canario es su elegido, o tiene complicado. En ese sentido, ha asegurado que él "para nada" se ha enrocado en Aridane.
Aún no ha llegado ningún futbolista y los que suenan, como son Álvaro González no parecen cuadrarle al técnico alicantino que, por otro lado ve como se van descartando otros como Aridane que a él le encajan más, todo y que esté lesionado. Pero es que, además, como informa este sábado Diario de Navarra Osasuna pida un traspaso por el jugador de 5 millones de euros, todo y que no juega en Liga desde septiembre.
"Para nada estoy enrocado en Aridane. Era una opción más y el club es el que decide. Nunca he dicho este jugador sí o sí, nunca he solicitado jugadores Top", ha explicado el técnico después, que ha insistido que lo que pasa en las reuniones queda ahí. No se pueden hacer públicas. He visto en los medios que yo estaba enrocado en Aridane, para nada. Aridane era uno más. Yo no decido. El club debe decidir si se trata de un jugador interesante y se valoran muchas cosas que a mí se me escapan."
En ese sentido, el club ha descartado pagar por Aridane, que lleva sin jugar en Liga tres meses, tiene problemas musculares y es mayor para ofrecerle un proyecto a largo plazo. Ahí han llegado las fricciones porque lo que está claro es que el central tiene que ser de consenso y ese acuerdo no llega. El problema es que la Copa del Rey y LaLiga Santander siguen adelante y no han llegado refuerzos y Bordalás está nervioso.
En todo caso, no es la primera vez que Aridane suena para el Valencia. En el pasado verano, su agente Raúl Molina ya reconoció el interés de los valencianistas. A Bordalás le cuadra más que Álvaro González, del Olympique de Marsella, jugador que ha sido ofrecido y que el club contempla todavía. Quedan 18 días y la hoja de ruta no cambia, las posiciones están claras, pero las gestiones no terminan por finiquitarse y el equipo se juega la vida en enero, tanto en Copa como en Liga. Y, en el caso del central, además, lo hace sin Gabriel Paulista.