Dani Parejo sigue disfrutando del fútbol en las filas del Villarreal después de su salida abrupta del Valencia CF. El de Coslada vive una segunda juventud en el conjunto groguet y con la madurez y la experiencia que otorga el inexorable paso del tiempo, valora todo lo que le está tocando en un club en constante crecimiento. Él siempre será un hombre importante en la historia del Valencia. Entre otros muchos hitos, es el capitán que alzó la Copa del Centenario en mayo de 2019, algo que no le sirvió para salir por la puerta grande del club de Mestalla, no al menos, por voluntad de la propiedad. Por parte de la afición, Parejo siempre tendrá su hueco y su reconocimiento. En el Valencia finalizó su etapa en un buen momento aunque al centrocampista le tocó vivir un sinfín de momentos contrastados, tanto buenos como malos. Por eso, sabe bien de lo que habla al referirse al entorno valencianista.
En una entrevista concedida a el diario El Mundo, Parejo hace referencia al entorno del Valencia y lo compara con la tranquilidad y el sosiego que existe en Villarreal y alrededor de la entidad presidida por Fernando Roig. "Es verdad que el Valencia tiene más masa social. Allí de cada cosa se hace un mundo, parece que siempre tiene que haber líos", señala Parejo a través de una respuesta que ha levantado algunas ampollas en Valencia.
Dani Parejo, durante su larga trayectoria en el Valencia, fue un futbolista tan criticado como idolatrado y que estuvo siempre en el ojo del huracán. En según qué temporadas, estuvo más fuera del Valencia que dentro. En 2016, fruto de su fractura con la grada de Mestalla, perdió el brazalete de capitán, aunque tiempo después lo recuperó. Muchos recuerda el verano posterior en el que llegó a declararse en rebeldía para forzar su salida, sin embargo, aguantó los peores momentos hasta la llegada de Marcelino García Toral. El técnico asturiano fue una suerte de reconciliación entre el Parejo y el Valencia y a partir de ahí llegaron grandes éxitos como el regreso a la Champions o la Copa del Rey ya mencionada.