José Bordalás volvió a optar por el esquema de cinco defensas con el regreso de Gabriel Paulista y Thierry al once. Con esta fórmula, el Valencia CF empató ante el Cádiz CF a cero en la jornada 30 de LaLiga Santander. El técnico alicantino sigue haciendo probaturas de cara a la final de Copa, que está a la vuelta de la esquina. La sensación de jugar con tres centrales es que el equipo es más sólido atrás, pero pierde potencial arriba. Mientras Bordalás encuentra el equilibrio en sus planteamientos, el tren europeo queda a cuatro puntos, pues LaLiga encara la recta final.
La vuelta de Gabriel al equipo en febrero, después de lesionarse el pasado 30 de octubre, supuso dejar la portería a cero en tres ocasiones (Mallorca, Athletic en Copa, y Getafe). Además, como Diakhaby y Alderete rindieron a buen nivel, Bordalás optó en los tres partidos desde la vuelta de Paulista por los tres centrales. Una fórmula que se repitió ante el Cádiz, donde se volvió a no encajar, pero no fue suficiente ante la falta de pegada en ataque.
La primera parte terminó sin goles ante la falta de llegadas y efectividad por parte de ambos equipos. El Valencia, con un bloque medio y una formación 5-2-2-1, buscó ejercer una presión intensa en ciertos tramos del primer tiempo. Sin embargo, el equipo de Sergio González, ordenado en 4-4-2, encontró mecanismos en salida de balón que le permitió progresar con facilidad. Pese a la nítida progresión del Cádiz con pelota, la defensa 'che' cortaba con solvencia las conducciones del equipo gaditano en zona de tres cuartos. En este sentido, Alderete volvió a estar imperial, tanto al corte como anticipando.
A nivel ofensivo, el Valencia no encontró manera de asociarse con eficacia. El poco atrevimiento de los centrales con balón, las desordenadas apariciones en ataque de los carrileros y la superioridad en el centro del campo del Cádiz sobre Soler y Guillamón imposibilitaron la circulación de la pelota con rapidez. Las apariciones de Bryan Gil y Guedes fueron lo más destacado del equipo 'che' en la primera mitad.
Ante la falta de clarividencia en zona de finalización, el entrenador del Valencia tuvo que intervenir tácticamente y cambió el esquema a 4-4-2 en el minuto 67, cuando Ilaix y Hugo Duro entraron al campo por Maxi y Alderete. Con todo, el equipo no fue capaz de perforar la portería de Ledesma y desperdició una oportunidad de oro para alcanzar Europa vía LaLiga.
Desde que regresó Gabriel Paulista por lesión, el hispanobrasileño ha jugado cuatro partidos, mientras ha descansado ante Granada y Elche. En estos cuatro encuentros, el Valencia ha dejado su portería a cero con el esquema de cinco defensas. Otro sujeto fundamental es Giorgi Mamardashvili, que encadena cinco porterías a cero consecutivas, presentando su candidatura para jugar en Sevilla el 23 de abril. Contra el Cádiz dejó una parada descomunal ante un cabezazo a bocajarro de Negredo.
Bordalás analizó el encuentro en rueda de prensa. Le restó importancia al dibujo a pesar de la solidez evidente que otorga: "Hoy volvían jugadores importantes como Thierry o Paulista que volvían de lesiones que les privaron de mantener el ritmo. Tengo que proteger a los jugadores y no correr riesgos. Nos ha ido bien así en muchos partidos el dibujo pero es lo de menos. Hoy nos ha faltado claridad y agresividad ofensiva de cara al gol".
Por otro lado, alabó la portería a cero, mientras hizo autocrítica de la falta de pegada arriba: "Bueno sí que es verdad que nos da confianza. Hemos encajado solo un gol (ante Granada) y en propia puerta. Dice mucho de la mejora a nivel defensivo. No pensamos en ello sino en que no hemos podido conseguir la victoria ante un rival que no nos ha permitido crear mucho porque son un equipo muy serio y ordenado. Ha habido muchas faltas y se ha parado un poco el ritmo. Nos ha privado de generar situaciones. El equipo lo ha intentado y no ha sido el mejor a nivel ofensivo".