Thierry Rendall regresaba a la titularidad del Valencia CF casi dos meses después de la lesión de rodilla que sufrió en un entrenamiento. Para la jornada 30 de LaLiga Santander, donde el equipo 'che' se vio las caras contra el Cádiz CF, José Bordalás decidió confiar en el portugués para defender el carril derecho del conjunto 'che'. Una decisión motivada, en parte, por la baja de Dimitri Foulquier, que se cayó de la convocatoria valencianista debido a unas molestias físicas en el pubis.
El 13 de febrero ante el Alavés fue el último encuentro que jugó Thierry Correia. El motivo fue el esguince del ligamento colateral medial de su rodilla derecha que sufrió a la semana siguiente en un entrenamiento. Una vez el técnico alicantino pudo contar con él, a primeras de cambio lo ha devuelto a la titularidad. Le ha dado confianza a falta de tres semanas para la final de Copa ante el Betis en La Cartuja.
El portugués actuó de carrilero derecho en una defensa formada por cinco integrantes, completada por Diakhaby, Gabriel Paulista, Alderete y Jesús Vázquez. Durante los primeros minutos del encuentro, Thierry demostró su exuberancia física con constantes subidas y bajadas por banda. Enfrente no tenía un rival sencillo, puesto que la banda izquierda del equipo gaditano era defendida por el 'Pacha' Espino, uno de los futbolistas más aguerridos del campeonato. Con el charrúa del Cádiz tuvo varios duelos, tanto ofensivos como defensivos, donde Thierry demostró su fiabilidad.
En la segunda parte, Thierry continuó intentando generar en ataque, pero sin éxito. Ante la nula lucidez del Valencia en tres cuartos de campo, y la dificultad para crear juego desde atrás, Bordalás decidió modificar su sistema en el minuto 67. Hugo Duro e Ilaix entraron al campo, dando salida a Maxi y a Alderete del campo. Por tanto, Correia pasó a jugar de lateral derecho en una formación 4-4-2. Sin embargo, el Valencia no encontró el gol pese a la insistencia, y el partido terminó 0-0.