Valencia y Levante empataron a un tanto en el derbi valenciano, un resultado insuficiente para las aspiraciones levantinistas de permanencia y en el que desaprovechó una de superioridad numérica de una hora, ya que creó pocas ocasiones de gol, aunque equilibró un partido que perdía. El empate deja al Valencia CF sólo un punto más cerca de Europa en LaLiga Santander pero todavía a nueve de distancia cuando quedan doce por jugarse.
La primera parte estuvo marcada por el gol de Hugo Duro a la media hora de juego y la inmediata expulsión de Gayà, lo que cambio la igualdad mostrada hasta entonces por un encuentro, sobre todo en la segunda parte, entre un Valencia replegado y a la espera de encontrar una contra y un Levante que se hizo con el balón, pero sin claridad de cara a puerta.
Fruto del dominio visitante llegó el tanto del empate a diez minutos del final y la tónica del encuentro no cambió y dejó una igualada que no satisfizo a nadie.
Con ambos equipos con la misma disposición, tres centrales y dos carrileros, el partido comenzó a buen ritmo, con aproximaciones varias y sendos remates, uno por equipo, de Guedes y Dani Gómez, que llevaron peligro de cara a gol.
El partido era intenso y con alternativas, aunque sin claridad de cara a puerta hasta que en el minuto 27, un centro de Gayà fue cabezazo por Hugo Duro con un remate que entró por la escuadra sin dar opción alguna a Cárdenas.
Sin tiempo para que la afición local saboreara la ventaja en el marcador, un acción en la que Gayá golpeó a Miramón y que fue revisada por el VAR acabó en roja directa para el capitán local después de que, inicialmente, se le hubiera mostrado la amarilla.
Esa circunstancia cambió radicalmente la dinámica del encuentro, que entró en una fase de numerosas tarjetas, incluida una para el entrenador local, José Bordalás, con muchas interrupciones en el juego y con un Valencia centrado en ralentizar el ritmo del encuentro a la espera del descanso.
En esa fase del juego, el conjunto local no fue capaz de generar ninguna aproximación a la meta de Cárdenas, mientras que el Levante no aprovechó su superioridad numérica pues le costó algunos minutos adaptarse al nuevo escenario del choque.
Solo en la última acción del primer periodo, una penetración de Dani Gómez obligó a Mamardashvili a realizar una buena intervención para evitar el tanto del equipo visitante.
Tras el descanso, Bardhi sustituyó a Radoja en el Levante y el Valencia dio entrada a Vázquez como laterala zurdo. Racic se situo como pivote por delante d ella defensa acompañado de Soler y Duro, con Guedes como único punta.
El Levante, con un hombre más, se adueñó del balón ante un Valencia absolutamente replegado y sin apenas opciones de salir a la contra, pero en los primeros minutos de la reanudación el dominio visitante no estuvo acompañado de llegadas a la meta local. El Valencia no tenía más argumento que defender y al Levante le faltaba claridad.
Morales tuvo la mejor hasta el momento (m.55), pero su remate centrado fue detenido por el portero del Valencia, en una fase del juego en la que el Valencia trataba de que pasara el tiempo a pesar del mucho que faltaba para el final a base de orden y solidez atrás.
El técnico visitante, Alessio Lsici, pasó a defensa de cuatro con media hora de juego por delante y metió a Soldado en punta para tener mayor capacidad ofensiva, pero su equipo no encontraba la forma de superar la maraña defensiva del Valencia a pesar de su control absoluto del juego.
El empate pudo llegar en un trallazo de Bardhi al larguero (m.77), en la ocasión más clara para el Levante de todo el encuentrohasta ese momento, previa al empate en un magnífico cabezazo de Óscar Duarte (m.82) que puso el 1-1 en el marcador. Tras el gol, el Levante lo intentó pero no pudo ganar ante un Valencia muy ordenado atrás,