Gattuso está en Singapur para reunirse con Peter Lim y trasladarle sus impresiones sobre los primeros meses al frente del Valencia CF. El italiano, a veces irónico a veces serio, aseguró en rueda de prensa que se quedaría con todos los jugadores con los que entrena. En este sentido, tras un verano atareado, el club comienza a trazar la hoja de ruta con las renovaciones que quedan pendientes y que urgen: ahora mismo diez jugadores de la actual plantilla quedarán libres en junio de 2023 si no hay movimientos. Es evidente que los habrá.
De hecho, el Valencia CF ya ha movido ficha y ha atado a su portero titular y una de las sensaciones de LaLiga Santander hasta la fecha. Después de Mamardashvili, otros jugadores -además, muy importantes hasta la fecha- están en el último año de contrato. Gayà, Guillamón, Lato, Diakhaby y Jaume Domènech. La mayoría de ellos tienen encarrilada una renovación con la que el Valencia ya contaba en cuanto al Fair Play Financiero, mientras otros la tienen en una fase muy primaria.
Cuatro de los cinco en esa situaciones son canteranos y valencianistas. No es que eso asegure la continuidad, pero el deseo es -en muchos casos- público. Por ello, Guillamón podría ser el próximo tras el interés del Athletic Club el pasado verano. Después de su lesión, la continuidad de Jaume -el más veterano de todos- no peligra y así se lo hizo saber el de Almenara a su portero. En cuanto a Lato y José Luis Gayà, no hay demasiadas diferencias. Parece que su situación avanza sin prisas pero sin pausa. Sobre todo en el caso del capitán, que pasará a ser el mejor pagado de la plantilla con 6 millones brutos más bonus. Es cierto que la competencia con Jesús Vázquez podría invitar a tomar la decisión de prescindir de uno de los tres, pero por el momento mejor juntos y revueltos.
El quinto en discordia es Mouctar Diakhaby. El internacional guineano vive su mejor momento como jugador valencianista y ahora mismo es el primer central de la plantilla con un rendimiento extraordinario. Por su fichaje, los cantos de sirena desde la Premier o incluso Turquía nunca han ido a más, mientras tampoco hay noticias sobre su renovación. Con su proyección, es tal vez el que más preocupa.
Todos serán libres para negociar con otro club a partir de enero, así que es seguro que su periplo en el Valencia durará como mínimo hasta junio. No obstante, si el Valencia quiere atarlos, lo debería hacer antes del mercado de invierno. Y otoño es tiempo de renovaciones.
El Valencia descartó una guinda más allá de la de Cavani y se reservó margen para las renovaciones. Avanza, aunque sin prisas. Por ese motivo, para cerrar la plantilla tuvo que acudir a las cesiones. Por exigencias del guion, muchas de ellas fueron simples. Cinco cedidos volverán a sus equipos cuando termine la temporada: Cenk, Kluivert, Nico González, Samuel Lino e Ilaix Moriba.
Sólo en el caso de Justin Kluivert, el Valencia acordó con la Roma una opción de compra de 15 millones. El neerlandés compite para arrebatar un puesto a alguno de los Samus, que son imprescindibles para Gattuso. Aun así, quizás no todos estén de paso y el Valencia se reserve una fórmula como una nueva cesión si es que terminan de convencer durante su estancia en Mestalla. Ilaix Moriba, uno de ellos, es el ejemplo.
Como están las cosas, el resto de los jugadores terminará contrato en las siguientes fechas:
Otros canteranos habituales en el primer equipo y que han participado esta temporada como Fran Pérez o Diego López finalizan sus contratos en 2023 y 2024 respectivamente.