Soto Grado, el árbitro que expulsó a Gayà, pita el duelo entre los dos equipos que peor caen a Rubiales

A Gayà lo han expulsado tres veces en su ya extensa carrera. El año pasado dos, Figueroa Vázquez en el derbi ante el Levante UD y César Soto Grado, que lo tiró ante el Sevilla en enero de este año tras una doble amarilla más que rigurosa y que curiosamente es el colegiado designado para pitar la próxima jornada de LaLiga Santander ante los hispalenses. Recientemente, el colegiado arbitró el duelo que enfrentó a los de Gattuso frente al Athletic Club en San Mamés.

 Además, El Confidencial, destapó recientemente una conversación entre Rubiales y su padre que el Sevilla FC y Valencia CF le caen mal: "A mí (me caen mal) en este orden Villarreal, Sevilla y Valencia". Su padre también incluye al conjunto blanquinegro entre los equipos que menos le gustan. Se ceban sobretodo con el Sevilla FC y su presidente. Casualmente estos dos equipos se enfrentan en la jornada intersemanal que se disputa esta semana.

La expulsión de Gayà en el último Valencia-Sevilla

El día del Valencia-Sevilla, Gayà fue expulsado tras una doble amarilla muy rigurosa sobre todo por el origen de la primera de las dos amonestaciones mostradas por Soto Grado, si bien la segunda parecía clara. En la primera mitad, una tangana donde Acuña le increpó acabó con la tarjeta para el capitán valencianista. La segunda fue tras una falta a Ocampos en banda derecha. Justamente, su expulsión llegó tras un gran partido del defensor ché, que puso un centro medido en la primera parte para que Guedes hiciese el 1-1.

La decisión de amonestar a Gayà sin motivo aparente tras ser agarrado por la nuca por Acuña en una tangana que se montó tras una reacción del lateral zurdo después de un lance del juego con Thierry. Además, esa tarjeta tuvo consecuencias nefastas a posteriori ya que el capitán vio la segunda amarilla en la segunda parte y acabó expulsado.

La guerra empezó con la Supercopa y siguió con arbitrajes

Aunque los audios entre Piqué y Rubiales crearon revuelo sobre la Supercopa en Arabia, el único club que puso en su día el grito en el cielo y todavía sigue adelante es el Valencia CF. Fue fundamentalmente por el reparto de la cuota de beneficios que se hizo entre los clubes que la disputaron. El pasado mes de junio, fuentes del club explicaban a ElDesmarque Valencia que "los audios de El Confidencial refrendan nuestra defensa de que en la Supercopa de 2019 hubo un reparto arbitrario, que no hubo acuerdos de la asamblea (no fueron aprobados en junta) y que esto se repartió en conversaciones de WhatsApp. Nuestra demanda era una defensa por el fútbol español, fuimos los primeros afectados, pero después han venido otros, como el Athletic Club. En contra de los perjuicios que podría tener, el club fue adelante, no aceptó minucias las negociaciones y club se ha mantenido firme", aseguran en referencia a que la demanda seguirá su curso.

En su día el Valencia criticó al cambio de modelo que se estableció ese año para la Supercopa, que pasó de dos a cuatro participantes (se invitó al Real Madrid y a Atlético de Madrid) y que disminuía sus opciones de triunfo, y especialmente lo hizo por estar el torneo ya en marcha y tener contendientes.

Este fue el inicio de la guerra entre el Valencia CF y la RFEF, que ha seguido con malos arbitrajes en contra de los de Mestalla o con aquella injusta y desproporcionada sanción a José Gayà.