Se hablaba antes del partido ante el CA Osasuna de que ganar era una obligación. No podía haber otro resultado teniendo en cuenta la situación del equipo. Es por ello que sumar de tres fue una liberación en todos los sentidos y así lo hizo ver el equipo en la celebración en el vestuario. Dejó grandes imágenes: la locura de Foulquier, el abrazo entre Baraja y Voro o las palmadas del Pipo a todos los jugadores. Puedes verlo en el vídeo de la parte superior de la pantalla.
La locura del vestuario fue la continuación de lo que ya se vivió en Mestalla, que volvió a llevar en volandas al equipo. Baraja lo resumió fácilmente en rueda de prensa: "Cuando estás en una dinámica negativa y necesitas encontrar cosas para mejorar, tener a tu público que te empuje es importante. Los jugadores tienen que sentir lo que significa jugar en Mestalla para que nos dé un plus. Si sientes a tu público, que sientes que cada acción te ayuda... es lo que te hace cambiar de dinámica. Eso va a hacer que el equipo mejore, crezca y evoluciones como lo está haciendo".
Analizar un partido después de una victoria siempre es más sencillo. Más todavía en la situación en la que se encuentra el Valencia CF, que no deja de ser dramática pese a que acabará la jornada fuera de los puestos de descenso más de un mes después. Los tres puntos no hacen más que reforzar el mensaje de Rubén Baraja: de la fuerza de Mestalla a tenerlos a todos enchufados. Y es que, casualidad o no, el único gol del partido lo anotó un jugador que no estaba teniendo demasiado protagonismo estas últimas semanas: Justin Kluivert. "Está con la convicción de que puede ser importante en cualquier momento que entre", dijo el Pipo en la rueda de prensa previa al partido. Y vaya si lo fue.