El Valencia CF ha terminado la temporada con la peor clasficación y las peores cifras goleadoras de las últimas cuatro décadas, en una temporada en la que el fantasmas del descenso ha estado presente hasta la última jornada, incluído el último partido de la temporada, en la que el equipo ché logró el empate frente al Real Betis (1-1).
El conjunto valenciano ha terminado el campeonato en la decimosexta posición con 42 puntos y ha marcado 42 goles en toda la Liga, 15 de ellos a domicilio, mientras que ha encajado un total de 45. Los máximos goleadores de la temporada, dentro del banquillo de Rubén Baraja, han sido Samuel Lino y Kluivert, quiénes han encajado seis dianas, cada uno.
Para encontrar una clasificación similar hay que remontarse a la temporada 85-86, cuando el equipo también acabó en el decimosexto puesto. Aunque en esta ocasión, el equipo perdió la categoría, ya que el campeonato estaba compuesto por 18 equipos y descendían tres conjuntos.
También los 42 goles anotados son el peor registro ofensivo desde la temporada 88-89, cuando finalizó el curso con 39 dianas. Pero, a diferencia de lo que ha sucedido esta temporada, y pese a esa corta cifra de goles, el Valencia CF acabó en tercera posición en la Liga, gracias, en parte, a los 26 goles que recibió, el mejor dato de los últimos 35 años.
La falta de gol a domicilio, fuera de Mestalla, el equipo tan solo ha anotado 15 tantos, unos datos que, tan solo encuentran comparación con lo sucedido en el curso 88-89 donde marcó 12 goles y también recibió otros 12.