Reparto de puntos entre el Almería y el Valencia CF. Reparto justo aunque, por momentos, el equipo local fue mejor y pudo hacerse merecedor de algún premio mayor. El caso empezó raro. Baraja, como te contamos en directo, perdió a Yaremchuk por molestias físicas, y sumaba seis bajas para el partido. El vallisoletano apostó de inicio por un once titular muy reconocible con un único cambio y obligado por lesión. Precisamente las ausencias marcaron el devenir del encuentro y favorecieron el mayor empuje local que terminó siendo superior y marrando más ocasiones.
Se ha quejado infinidad de veces Baraja de que su plantilla es corta y en Almería se notó. Y eso que el Valencia se adelantó por dos ocasiones. Primero gracias a Diego López, que fue titular y puso en ventaja al equipo con un gran gol. El Almería empataría en el 59 pero, de nuevo Guerra adelantaría al Valencia. Qué coj.., coraje tiene este grupo. Los locales, con más profundidad de banquillo, terminaron por igualar la contienda en el 69 y aún pudieron ganar.
Cómo fue la cosa y cómo es de corta la plantilla que hasta tres jugadores del Valencia acabaron con calambres y cambiados: Hugo Duro y Diego López tterminaron arrastrándose. A este grupo y a este entrenador no se le puede pedir más.
En la previa hubo debate porque se enfrentaban dos clubs con propietarios únicos y extranjeros pero bien distintos. El jeque del Almería, que se ha gastado una millonada (50) y apuesta por su club y el magnate de Singapur que ha empequeñecido al Valencia y tiene al equipo con una plantilla corta y una afición en contra, como volvió a demostrar en Almería. La teoría dictaría por tanto que los locales fueran mejores y ganaran y es cierto que juegan bien y crean ocasiones, pero les falta pegada y ese impúdico ímpetu de la Quinta del Pipo que, cuando tiene el balón, corre desbocada hacia la portería contraria y hace daño. Por eso, en dos ocasiones el Valencia marcó y el Almería necesitó muchísimas más llegadas para lograr el mismo premio.
Sin la pelota el Valencia es un equipo joven, a veces bisoño -que le cuenten a Mosquera como sufrió con Luis Suárez- pero solidario y que trabaja. El técnico vallisoletano sabe que defender bien es la clave.
Si la plantilla se quedó corta en verano es porque, al no ser vendido Mamardashvili como quería Lim, el equipo ya no se reforzó apenas. El singapurés terminó por cortar el grifo. Pues menos mal que se quedó el georgiano, ya que fue de los destacados y salvó a su equipo con dos intervenciones maravillosas antes del descanso y otras dos en la segunda parte que evitaron la derrota. El meta la tocó en los dos goles rivales, pero Arribas aprovechó la caraja de la zaga y el agotamiento para igualar la contienda por dos veces.
De momento, el ímpetu bastó para sumar ante un modelo que aunque es colista apunta maneras. La duda es saber entre tanto calambre cuánto aguantará este Valencia.