La doble sorpresa de Baraja que desbarató los planes de Xavi

Rubén Baraja planteaba el partido ante el FC Barcelona con bajas capitales como José Luis Gayà, Gabriel Paulista y Javi Guerra, estos dos últimos por haber visto la tarjeta roja ante el Getafe CF. El técnico del Valencia CF tuvo que plantear el once con novedades y cambios. Para ello decidió revolucionar la táctica y plantear un 4-4-2 con doble punta puros. Los elegidos para el ataque fueron Hugo Duro y Roman Yaremchuk que conectaron muy bien a la hora de crear peligro. Este nuevo planteamiento también tiene que ver con la recuperación de Alberto Marí. Rubén Baraja ya avisó en una rueda de prensa que "nos puede dar la opción de jugar con dos delanteros puros como ya hicimos con Diego y Hugo". El equipo salió con esta táctica y tácticamente fue bien. Tan solo habían pasado unos segundos cuando llegó la primera ocasión, Hugo Duro arrastró al central y Yaremchuk encontró el espacio para girarse y rematar. 

La nueva disposición daba más importancia al juego por bandas o a la rápida conexión con los dos delanteros. Pepelu y Hugo Guillamón tuvieron un rol más defensivo que cumplieron con creces. Además, los dos mediocentros de las bandas estuvieron muy pendientes de la defensa. Diego López proporcionó muchas ayudas y fue clave para evitar goles del Barcelona.

Las variaciones de Baraja con la nueva táctica

La nueva táctica del Valencia CF contra el Barça, que se vio modificada en parte a la vuelta de Alberto Marí parece tener diferentes variables. Baraja apostó por la conexión Yaremchuk-Duro de inicio e iba bien. Sin embargo, tras el gol encajado el equipo necesitaba cambios. Con el marcador en contra se debñia buscar más velocidad y por eso cambio a Diego López por Yaremchuk para situarse de 9 y el ucraniano al banquillo por Canós. El resultado fue el gol del empate por parte de Hugo Guillamón. El partido terminó con Alberto Marí como delantero volviendo al 5-4-1.