Con el anuncio por parte del Ayuntamiento de Valencia que en el primer trimestre de 2024 otorgará las licencias al Valencia CF para que pueda retomar las obras del Nou Mestalla, se ha reactivado el interés de varias empresas por adquirir las parcelas del actual estadio situado en la Avenida de Aragón.
En ese sentido, según ha avanzado ElDiario.es una empresa vieja conocida del valencianismo como es Atitlan se habría interesado en la compra de esas parcelas. La firma valenciana de Aritza Rodero y Roberto Centeno, yerno de Juan Roig, es el fondo con el que el Valencia tiene un principio de acuerdo para la venta de la pastilla del terciario del Nou Mestalla, unos 41.000 m², que le reportarán alrededor de 30 millones de euros, tal y como ha venido informando ElDesmarque.
Este interés, que de momento no pasa de ahí, está pendiente de que el Valencia CF avance con las instituciones urbanísticamente hablando en la obtención de las licencias (previstas para febrero o marzo), la aprobación final de las fichas urbanísticas, acordadas en tiempos del PSOE y Compromís, y que tienen que pasar por el pleno en febrero seguramente, y el convenio definitivo que sustituya a la ATE.
Según estos documentos, el Valencia sólo podrá disponer del terciario del Nou Mestalla cuando el club pague el polideportivo y sólo podrá disponer de la edificabilidad del Mestalla (89,000 metros cuadrados entre viviendas y zona comercial) a medida que se pidan las licencias de obras del Nou Mestalla y se acabe.
Eso sí, la alcaldesa ha puesto cuatro nuevas condiciones para dar el siguiente paso: "Ahora bien, vamos a poner en la mesa más exigencias de las que nos encontramos cuando llegamos al gobierno. Cuando empiecen las obras y veamos que están avanzadas empezaremos a trabajar en el convenio que fijará algunas cuestiones"
Más garantista no se puede ser. Mano firme pero sin paralizar ningún proyecto en el que esté en la ciudad de Valencia".
Ese dinero por la venta de las parcelas, que el Valencia CF no podrá disponer hasta que no construya el viejo campo, al igual que no podrá disponer del terciario del nuevo estadio hasta que no empiece las obras y abone los 10 millones de euros que cuesdta el polideportivo anexo, tal y como está fijado en las fichas urbanísticas acordadas y que deben pasar por el pleno del Ayuntamiento todavía, servirá junto al dinero del Fondo CVC para acabar el Nou Mestalla y que sea sede para el Mundial 2030 y, de paso, aligerar la deuda de la entidad. Hay que recordar que, según ha informado el Valencia CF, aún faltan al menos de 170 millones para acabar el Nou Mestalla.
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