Las cinco conclusiones que saca el Valencia CF de la derrota en Gran Canaria

El de Gran Canaria fue un partido muy táctico en el que el marcador no se movió hasta los últimos instantes de juego. La UD Las Palmas dominó el balón y el Valencia CF esperó, paciente, su oportunidad. Tuvo más de una ocasión, especialmente las que estuvieron en botas de Jesús Vázquez y en la cabeza de Mosquera. Sin embargo, los valencianistas se fueron con las manos vacías después de que el plan de Baraja se viniera abajo en el minuto 89, cuando Álex Suárez marcó el primer gol. No sería el último, pues en el 95' Marc Cardona anotó el segundo. Duro golpe para el club de Mestalla, que podía optar a igualar en puntos al Real Betis, sexto clasificado, en una posición que da acceso a Conference League.

La siguiente oportunidad será contra el Sevilla FC en Mestalla, aunque el equipo ha de aprender varias lecciones para que estas situaciones no se vuelvan a dar. En ElDesmarque analizamos las cinco conclusiones que deja la derrota:

Todos los minutos cuentan

El único hándicap del Valencia CF fue todo aquello ocurrido a partir del minuto 89. En otros partidos, a los de Baraja les había funcionado lo de mantener el resultado. Después de haber inhabilitado a la UD Las Palmas durante todo el partido, como reconoció Baraja en rueda de prensa, los locales consiguieron marcar dos goles para sentenciar el partido. El primero fue de Álex Suárez, en el 89', tras un córner. En una jugada trastabillada, el balón acabó al fondo de la red. Unos minutos después, en el 95', Marc Cardona aprovechó un rechace muy poco contundente de Mamardashvili para empujar el balón de nuevo. Duro golpe para un Valencia CF que podría haber rascado un punto de un campo que siempre es complicado.

La calma en el último pase

El propio Baraja reconoció en los micrófonos de Movistar+ tras la finalización del partido que al Valencia CF le había faltado "esa calma en los minutos finales". Sobre ello, aseguró que sus pupilos no tuvieron claridad en la zona de finalización, pues los blanquinegros sí gozaron de algunas oportunidades para adelantarse en el marcador en los instantes finales, justo antes de que la UD Las Palmas hiciera lo propio. Pólvora mojada para los jugadores ofensivos, al contrario de lo ocurrido en Mestalla contra la UD Almería, donde la doble delantera anotó por partida doble.

La afición nunca falla

Pese a la distancia, el horario del partido y el coste económico que suponía tal desplazamiento, más de 2.000 kilómetros, la afición del Valencia CF no dejó solo al equipo en el Estadio de Gran Canaria. Hasta 184 aficionados estuvieron presentes para apoyar a los de Rubén Baraja en el que era un importante encuentro de acuerdo con las aspiraciones europeas. El resultado terminó siendo el más dañino, aunque la ilusión de la afición se mantiene intacta debido a la conexión con el equipo.

Foulquier destaca en una noche gris

Para los jugadores del Valencia CF, el partido fue muy distinto dependiendo de la posición que ocupaban. Hugo Duro, que vive su mejor vida en el equipo, apenas vio el balón. No le llegó nada a pesar de correr e intentarlo, como siempre hace. Guillamón tampoco estuvo tan acertado como en citas anteriores. Mamardashvili falló en el segundo gol. En cambio, Foulquier sí sigue mejorando su versión predecesora. Ha conseguido sobreponerse de su papel en los primeros partidos de la temporada, y ahora acostumbra a ser de los mejores del Valencia CF. No tenía una tarea fácil con la banda izquierda de Las Palmas, más aún tras la entrada de Moleiro al partido.

Europa sigue estando a tres puntos

El "pinchazo" de la Real Sociedad contra Osasuna abría la puerta al Valencia CF para igualar al Real Betis como sexto clasificado con 38 puntos. Esta posición da acceso a Conference League, aunque también lo daría la séptima en caso de que el ganador de Copa sea uno de los seis primeros clasificados. En todo caso, este puesto sigue estando a la distancia de una única victoria. Los de Baraja ocupan en estos momentos la octava posición con 35 puntos, lo cual ya es un éxito teniendo en cuenta las previsiones para esta temporada respecto a la anterior. La lucha sigue viva.