Luciano Sánchez y Miguel Ángel Benítez, los dos casos que dan esperanza a Diakhaby

El Valencia CF sigue conmocionado con la grave lesión de Mouctar Diakhaby que, como explicó el doctor Ripoll en ElDesmarque, es “de las más temidas por los médicos” y le puede tener fuera de los terrenos de juego más de un año, si puede volver a jugar. Antecedentes de este tipo de luxación no hay demasiados, aunque sí que hay algunos casos. Por ejemplo, el de Miguel Ángel Benítez, que se recuperó tras 18 meses fuera de la cancha. Más reciente fue el de Luciano Sánchez, al que lesionó Marcelo hace ahora siete meses. Ya lleva dos operaciones y aún le queda.

El que sí que consiguió volver a calzarse las botas para jugar a fútbol fue Miguel Ángel Benítez, al que se le "erizó la piel" al ver la lesión de Mouctar Diakhaby. Así lo relata para el diario As: "Es lo más parecido que he visto en mi vida a lo que yo sufrí en la rodilla”.

"A mí muchos me retiraron": el ejemplo para Diakhaby

Miguel Ángel Benítez relata cómo vivió esos primeros días tras su lesión, que sufrió justamente a la misma edad que Diakhaby: “Casi me tuvieron que amputar porque se me hinchó como un balón de baloncesto y la sangre apenas circulaba por esa parte. A mí muchos me retiraron”. No obstante, con fuerza mental logró superarlo: “Yo tardé casi un año y medio en jugar. Tuve ocho cosas afectadas en la rodilla. Me tuvieron que operar dos veces. Además, estuve 45 días ingresado antes de poder pasar por el quirófano”.

Ahora bien, habla del calvario que les espera ahora a Diakhaby. No será un camino de rosas: “Yo le metí muchas horas de rehabilitación, me sacrifiqué mucho. Me torturaron durante un año y cuatro meses. Hay que pasar por mucho dolor para superarlo. He conocido muchos compañeros que han dejado la profesión porque no aguantaron el dolor. Si psicológicamente no estás bien, te pueden retirar. Por suerte, yo estaba preparado para recuperarme porque ya había sufrido una lesión grave que me dejó ocho meses fuera. Pero esta lesión era el doble. Al final, la familia es clave. A mí me torturaban durante ocho horas, pero llegaba a casa y cargaba las pilas con mi hijo”.

Eso sí, Benítez explica que no pudo volver al más alto nivel de inicio y que tuvo que volver a coger ritmo en el Olimpia, "donde la exigencia física no era la misma". Poco a poco, afirma, fue recuperando su nivel.