Tuvo la oportunidad de ser titular y conquistó El Sadar. André Almeida volvió al once de inicio desde hacía más de medio año debido a los problemas físicos que ha arrastrado durante gran parte de la temporada. Aprovechando su gol en Granada y el cambio de esquema de Rubén Baraja, su momento llegó. Ya en el minuto 14 estuvo muy cerca de dar una asistencia con un pase que dejó solo a Hugo Duro sin portero pero que Herrando consiguió solventar. Cuatro minutos después, en el 18', llegó el 0-1 desde su botas que a la postre dio la victoria final. Mediante un disparo raso y potente desde el borde derecho del área y dirigido al palo largo consiguió batir a Sergio Herrera, que lo tuvo imposible. Desde luego, a André Almeida no se le puede pedir más después de la vuelta de su lesión. Dos goles en apenas 105 minutos.
Sin Roman Yaremchuk en el terreno de juego, Baraja dejó solo a Hugo Duro en la delantera con André Almeida de enganche, a su derecha. El portugués presionó alto, pero también bajó a recibir, por lo que tuvo presencia en todas las partes del campo. Con Diego López y Fran Pérez en cada uno de los costados, el mago ostentó los galones del equipo para conectar las líneas. Sus aportaciones pudieron ser mayores, de hecho, estuvo a punto de sumar hasta dos asistencias con el mismo socio: Hugo Duro.
André Almeida es un jugador muy completo y que siempre tiene algo que aportar en todas las facetas. Así lo demuestra su mapa de calor durante el partido. Omnipresente, el portugués fue fundamental tanto de cara a portería como en la generación de pases clave. Esto mismo también ocurrió en los ocho partidos que el centrocampista pudo jugar antes de comenzar con sus problemas físicos. Baraja optó por esta posición y, unos meses después, ha vuelto a funcionar.
En la temporada pasada, el mago de Mestalla también fue importantísimo para conseguir el objetivo, que terminó siendo la salvación. El Valencia CF ha tenido que prescindir muchos partidos de este mismo curso de su número 10, pero está de vuelta. Y vaya que si lo está. Sus goles han valido un total de seis puntos, pues ambos partidos se ganaron por la mínima. Una pieza inamovible si los del Pipo quieren seguir soñando con estar en competición europea la temporada que viene.
El gran damnificado después de la apuesta por André Almeida en el once titular fue Hugo Guillamón. El debate en torno a la alineación del Valencia CF se centró en quiénes serían los dos elegidos, de tres, para el centro del campo. Entre Javi Guerra, André Almeida y Hugo Guillamón terminó cayéndose este último. Uno de los motivos por los que se dudaba acerca de si el mago sería titular era su estado físico. En Granada ya contó con unos treinta minutos, pero Baraja decidió que el portugués estaba listo para comandar al Valencia CF.
De hecho, el partido de André Almeida llegó a su fin en el minuto 75 cuando fue sustituido, precisamente, por Guillamón. Era el cambio esperado y además Osasuna estaba asediando cada vez más la portería valencianista. Con la entrada del dorsal 6, el equipo siguió buscando la fortaleza a nivel defensivo. El mejor socio de André Almeida, Hugo Duro, se marchó en la misma ventana de cambios que el goleador del partido.