Poco después de que Maria José Catalá convocara a los portavoces del Ayuntamiento para ver cómo quieren afrontar la aprobación de las fichas urbanísticas y el convenio para poder desatascar el asunto del Nou Mestalla con el Valencia CF, el club mandó un escrito de respuesta al Ayuntamiento del que ya informó ElDesmarque.
En él, el Valencia CF le hace una oferta firmada por Layhoon Chan, presidenta del club al municipio: "El VCF quiere manifestar su intención decidida de iniciar las obras de construcción del Estadio tan pronto sea posible una vez sean concedidas las licencias por parte de ese Excmo. Ayuntamiento. En este sentido les anticipamos que es intención del VCF iniciar las obras dentro del plazo legal de 6 meses desde el otorgamiento de la licencia de obras y previa elaboración del Proyecto de Ejecución, estimando que las mismas se acometan en un plazo de entre 30 y 42 mese desde su inicio".
Es decir, el club se compromete a empezar con las licencias y en un plazo de seis meses máximo cuando tenga el Proyecto de Ejecución (no el proyecto que presentaron en enero para que le den las licencias, el del Tholos), que es el que desarrolla y se define en su totalidad y en detalle el proyecto arquitectónico, con la información suficiente para hacer viable la construcción del campo definiendo todos los materiales, sistemas constructivos, instalaciones, equipos, etc…
Y es verdad que luego el Valencia CF vincula la finalización de las obras a "la zona terciaria al norte del estadio haya concluido los trámites administrativos previos y concluido la obra hasta cota 0 para poder finalizar esa parte de obra, asegurando accesos y vías de evacuación del estadio, lo cual también depende a su vez de la aprobación del Plan ATE así como de la aprobación del estudio de detalle y licencia de obra de dicho terciario", es decir, que pide para acabar las fichas y el Convenio.
Preguntado por este punto, fuentes del club confirman a ElDesmarque que la carta de la presidenta, en efecto, es un compromiso a empezar las obras sólo con las licencias, sin necesidad de que estén ya las fichas y el convenio. Es un cambio importante de lo sucedido hasta ahora.
La carta de la presidenta, confirman a ElDesmarque, en efecto, es un compromiso a empezar las obras sólo con las licencias, sin necesidad de que estén ya las fichas y el convenio
Llegados a este punto, cabe recordar que las fichas urbanísticas son el marco jurídico y urbanístico que sustituye a la ATE. Esas fichas están absolutamente acordadas, cerradas y enviadas para su aprobación en el pleno desde tiempos de el PSOE y Compromis. El Ayuntamiento tiene hasta agosto para aprobarlas, pues es cuando acaba el plazo de dos años que marca la Ley tras haber caducado la ATE en verano de 2022. Es lo que los portavoces deben decidir el jueves si llevan al pleno, si no, o qué condiciones ponen.
Pues, a falta más explicación, básicamente por un tema político. El PP solo no puede aprobarlas, no tiene mayoría y, aunque asegura que son las mismas que aprobaron PSOE y Compromís, estos piden más. VOX, un verso suelto, ha dicho que no va a firmar ni apoyar nada que sea favorecer a Peter Lim ("Es mi enemigo", dice Badenas que en la última manifestación se presentó como el presidente del Valencia CF). El PSOE-PSPV dice que no las aprueba porque sospecha que el PP ha modificado el convenio, negocia a sus espaldas con el Valencia CF, y no les ha dicho nada. Compromis dice que no votará favor si además no se aprueba a la vez el convenio urbanístico. El jueves los grupos deberán decir qué quieren.
Parece claro que Compromís y el PSOE pedirán para aprobar las fichas que también se firme el convenio. El convenio urbanístico es el marco jurídico que regula las compensaciones para las partes (Valencia ciudad y club). Es el documento donde se establece cuando puede utilizar la ciudad el estadio (para competiciones de atletismo); las compensaciones por la cesión de terrenos; uso del parking, quién lo paga para cuando no sean partidos de fútbol etc.. el pago del polideportivo, si habrá cubierta energética, en definitiva cómo será el estadio que merece la ciudad y las contraprestaciones que el Valencia y el Ayuntamiento se hacen mútuamente por la permuta de terreros y las recalificaciones que permitió empezar las obras hace ya 15 años.
¿Y qué pasa con el dichoso convenio? Pues de nuevo discrepancias políticas y con Lim. Con Meriton, Peter Lim o el Valencia, los grupos políticos quieren apretar y exigir al máximo para que sea el mejor estadio posible y la ciudad se vea favorecida por haber facilitado en su día la construcción del campo. Pero claro, hay límites. Sirva por ejemplo la petición de Compromis a través de Papi Robles para que la cesión del estadio para eventos ajenos a los partidos del Valencia sea gratis.