Rodrigo De Paul recuerda su fichaje por el Valencia: de ser un pilar para Pizzi a llegar con el entrenador fuera del club

El Valencia se encuentra a punto de iniciar una temporada más en LALIGA EA SPORTS. La primera con Rubén Baraja como técnico a comienzo de curso. Un técnico que ha sabido aprovechar los recursos que había en el equipo y en la cantera ché. A la espera de los posibles fichajes que puedan llegar a Mestalla, un exfutbolista del equipo valencianista como Rodrigo de Paul recordó su fichaje por la entidad.

El actual jugador del Atlético de Madrid llegaba al equipo del río Turia con 20 años. Una petición personal del entonces técnico, Juan Antonio Pizzi. Su mayor valedor tras asegurar que se trataba del "futbolista con más proyección que había salido de Argentina en los últimos cinco". Unas palabras que comentó en 2014 y que, sin embargo, no pudo disfrutar de él cuando llegó al Valencia. Algo que recordó el propio mediocentro en una entrevista que le realizaron en el podcast Nadie dice nada.

Rodrigo de Paul llegó en la 2014-15

El mediocampista reconoce que se encontraba bien en Racing, siendo el capitán cuando tenía 18 años. Sin embargo, la llamada del entonces entrenador del Valencia lo cambió todo. "Estaba un entrenador que se llama Pizzi y me llama diciendo que iba a formar un equipo alrededor mío", expresó, añadiendo que "es la mía, me voy". Una oportunidad de oro para llegar a Europa. No obstante, sus inicios no fueron los esperados. "Entro al hotel y veo a Pizzi con las Maletas", recordó añadiendo que el técnico le dijo "me echaron".

Algo que sorprendió a los colaboradores del podcast. El jugador había llegado en calidad de traspaso, por lo que no había otra opción que gustar al siguiente técnico. Nuno Espiritu Santo. "Viene un entrenador, super bien, y el primer día estaba en el banco, entro y a los 40 segundos me expulsan. Un Sevilla-Valencia que acabó con empate a uno. Un codazo, "similar al de Messi en la Selección". Tras el encuentro el director deportivo intentó calmarle diciendo que, seguramente, iban a quitarle la roja. "El lunes, una portada de un periódico señalaba que estaría fuera cuatro partidos por ser acto violento", recordó, añadiendo que pasó "un mes sin jugar".

Un lugar nuevo al que llegó al que, afortunadamente se encontraban varios compatriotar y que el mismo día de su llegada, lo hizo también Otamendi. Una temporada completa y en el mercado invernal de la siguiente regresó a su Racing de Avellaneda en calidad de cedido. A su vuelta fue vendido al Udinese antes de regresar a LALIGA EA SPORTS. 35 millones pagó el Atlético para firmar al mediocampista internacional por la albiceleste. 44 partidos en los que hizo dos goles y dio cuatro asistencias.